Rahm: "Puedo decir que Tiger me vio llorar, pero por ganarle"
El de Barrika venció al Tigre (2&1) en el cuarto partido de individuales del domingo, un triunfo clave para Europa: "Crecí viéndole jugar y no he podido contenerme".
Si alguien le hubiese dicho a Jon Rahm al empezar la temporada que iba a terminarla consiguiendo su primera victoria en la Ryder Cup frente a Tiger Woods, el vizcaíno seguramente no le hubiese creído. Pero no habría fallado, porque el 'León de Barrika' estrenó su casillero de triunfos ganándole en el cuarto partido individual del domingo (2&1), un punto que frenó el amago de remontada norteamericano y templó a los europeos poniéndoles a dos de levantar la copa.
Fue un duelo generacional apasionante, entre el hombre que dominó el golf como nadie lo había hecho antes a comienzos de siglo y uno de los que está llamado a ser referencia en los próximos tiempos. Rahm golpeaba primero, llevándose el uno, y ampliaba a dos su ventaja en el siete. Reaccionó Tiger antes del ecuador, para empatar ganando el 9 y el 12. Parecía que llegaba mejor a la recta final. Pero se desinfló con dos bogeys y Rahm se anotó el 13 y el 14 en el par. Intentó volver Tiger, pero recibió un portazo en la cara en forma de birdie del vasco en el 17 y claudicó.
El aprendiz superaba al maestro y se despojaba de toda la rabia acumulada por perder dos puntos en los fourballs de viernes y sábado. Tal fue la emoción de Rahm celebrando que se le olvidó felicitar al Tigre y éste tuvo que ir a buscarle para darle la mano: "Ha sido muy majo conmigo y al acabar, cuando me ha venido a saludar, le he pedido perdón y me ha dicho que no me preocupara. No he podido contener la emoción porque he crecido viéndole jugar. Ahora puedo decir que Tiger me ha visto llorar... Pero por ganarle". "Jon tenía en la cabeza que tenía que ganar y ha jugado muy bien. Se veía que hoy era su día, por lo menos yo lo intuía", contaba Edorta, su padre. Seguro que no era el único.