RUGBY

¿Quiénes pueden, o no, jugar con una selección de Rugby?

La normativa actual de World Rugby habilita a un jugador para ser internacional absoluto en tres supuestos. Belie y Fuster los cumplen, pero habían sido internacionales con Francia.

JESUS ALVAREZ ORIHUELADIARIO AS

La normativa actual de World Rugby habilita a un jugador para ser internacional absoluto en tres supuestos: haber nacido en el país, ser descendiente de alguien originario de dicha nación o lograr la nacionalización por residencia. Todos ellos sujetos, y es muy importante, a no haber sido Internacional antes con otro país o con el segundo equipo representativo del mismo. Detalle que explicaremos más adelante.

Siendo un jugador nacido en España puede actuar con los Leones de forma lógica y natural. Es la vía más sencilla y directa. También si uno es nieto o hijo de una persona de dicho país, de ahí la cantidad de jugadores franceses actualmente en el combinado nacional. Todos ellos tienen antepasados que salieron de España por diferentes motivos, algunos por el exilio de la Guerra Civil. ¿Y por qué España tiene a jugadores neozelandeses como Linklater o Snee? Porque ambos jugaron durante tres años seguidos en nuestra competición doméstica. Para evitar ese trasiego de profesionales, algo que mancha sobre todo a combinados como el XV del Gallo, la normativa cambiará a cinco años (dos más del actual requisito).

Belie y Fuster, descendientes de españoles e internacionales con el XV del León, incumplieron la normativa y eso sancionó a España. ¿Por qué? Por lo comentado anteriormente, ambos fueron internacionales con Francia Sub-20 en 2008 y 2012. Ahora un jugador de esa categoría puede cambiar de país aún siendo ya internacional gracias a que la sub-20 ahora no es el segundo combinado nacional de Francia. Pero en su momento sí tenía esa etiqueta la sub-20 del Gallo. Más allá de que la Federación Francesa fallara en las notificaciones, la normativa vigente entonces les bloqueaba. Ahora eso ha cambiado, de hecho hay internacionales con España en categorías inferiores, como el barcelonés Samu Ezeala, que debutó esta temporada con el primer equipo de Clermont, al que Francia pretende nacionalizar.

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