Los Leones, a 80 minutos de encarrilar el pase al Mundial
El domingo, ante Rumanía (12:45, TDP), España debe ganar con bonus ofensivo o evitar el defensivo de los Robles para estar virtualmente en la cita de Japón 2019.
Cuatro años de trabajo condensados en 80 minutos. Los que hace que España perdió sus opciones de clasificarse para el último Mundial y los que separan ahora a los Leones de estar virtualmente en el próximo. El partido de una generación que no llegó a tiempo de saborear Gales 99 (la única cita mundialista con presencia española hasta la fecha) y ahora se relame ante la posibilidad de ver a los suyos inaugurar Japón 2019.
El día D es el domingo, la hora H las 12:45 y el rival a batir Rumanía, con el Estadio Central de la madrileña Universidad Complutense como escenario. Para conseguir virtualmente un billete directo al país nipón es necesaria una victoria con bonus ofensivo (3 ensayos más que el rival) o sin el defensivo de los rumanos (perder por 7 o menos).
Los Robles, que han estado en los ocho mundiales disputados hasta la fecha, son pura potencia física, acorazados en el contacto y jornaleros de la melé y el maul. En noviembre, "la referencia que hay que valorar de ellos" según el Seleccionador español Santiago Santos, dieron el callo venciendo a Samoa y cediendo sólo al final del partido ante Tonga, otras mundialistas habituales.
En el XV que pondrán en liza ante España destacan jugadores como el pilier Lazar (58 caps y más de 100 partidos con el Castres de Top-14) o el flanker Macovei (capitán y 76 veces internacional) en delantera. En la línea, la bisagra del Steaua Surugiu-Vlaicu (el último máximo anotador histórico de la Selección) y tres exhuberantes tonganos del 12 al 14 que no bajan del 1.82 de altura y suman 321 kilos entre ambos: Fakaosilea, Kinikinilau y Fonovai.
Por su parte, Santos alineará a un equipo con sólo un cambio respecto al que se midió a Rusia el sábado pasado: entra Jesús Moreno en el 3 por Jonathan García, lesionado de gravedad en la rodilla ante los Osos. En el banquillo, otro pilier como Xerom Civil y el segunda Gavidi aguardarán su oportunidad, este último en lugar de Aníbal Bonán.
En los últimos años, los Robles sólo hincaron la rodilla ante el León en dos ocasiones, con la victoria de 2012 (13-12) en el Central como referencia más cercana. Pero las distancias se han venido reduciendo y el duelo nunca fue tan trascendental. Ahora es el "partido de nuestras vidas" en palabras del capitán español, Jaime Nava. Porque se sabe que no todo acaba en Rumanía (hay más opciones de ir al Mundial si se pierde), pero también que sería el puñetazo en la mesa que necesita el rugby español para crecer.
