España caza a los Osos de Rusia y se acerca a Japón
Tumbó a Rusia en Krasnodar (13-20) con una genialidad de Belie y una defensa numantina. Paso de gigante para ir al Mundial.
El primer paso está dado. España tenía que vencer a Rusia en Krasnodar para acercarse al Mundial de Japón y lo consiguió (13-20). Asaltó la guarida de los Osos con ferocidad en el placaje y mucho oficio en los puntos de encuentro para sumar una victoria doblemente dulce porque se sudó hasta la última gota.
El partido comenzó muy bien para los Leones. Día soleado en Krasnodar y un ambiente mucho menos hostil del que se esperaba con apenas media entrada en el Estadio Kubán. España empezó con personalidad, llevando el oval de lado a lado del campo y a punto estuvo de ensayar en su primera posesión. Pero un resbalón abortó la posibilidad desencadenando una serie de contratiempos a los que España tuvo que sobreponerse para llevarse los puntos a casa.
Siguió la lesión de Jonathan García, que obligó a Jesús Moreno a refrescar prematuramente la primera línea, y casi acto seguido, con diez minutos jugados, llegó el ensayo ruso aprovechando un fallo español en melé con una patada de pillo de Shcherban. Lo posó Gerasimov y lo convirtió Kushnarev para el 7-0.
Pero España trabajaba bien el maul tras touch y en el 25' uno de ellos lo culminó Rouet, el más listo de la clase. Falló la conversión Linklater anunciando que no iba a tener su mejor tarde en el pateo. Ahí jugó también el pésimo comportamiento de los aficionados rusos, que pitaron todos y cada uno de los intentos del 14 español. Cinco minutos después Rusia aprovechaba un golpe de castigo para ponerse otra vez a un ensayo de distancia y en el 32' volvía a responder Rouet, en segundo esfuerzo tras una gran ruptura de Lucas Guillaume. La conversión si entró esta vez y aprovechando un golpe de castigo ruso al filo del descanso España se fue a vestuarios con un ensayo de renta.
En la segunda parte aumentó la violencia en los contactos y continuaron los problemas. Linklater falló una patada para poner a los Leones a más de un ensayo transformado de distancia y Jaime Nava, el capitán, se retiró lesionado poco antes de que el pie de Kushnarev, en el 64', acercase a los rusos. Sólo una genialidad podía resolver un partido que se dirimía en los puntos de encuentro y esta salió del pie de Mathieu Belie en el 68'. El apertura de Toulouse, tierra del 'flair' francés, vio hueco en el flanco izquierdo de la defensa rusa y cruzó una patada que recogió y posó Barthere.
El partido podía haber muerto ahí si la transformación de Linklater, para poner a España a nueve, no hubiese pegado en el palo. Lo que siguió fueron 10 minutos heroicos de los de Santiago Santos. Sobre todo los últimos cinco, cuando cedieron la posesión y tuvieron que emplearse en una defensa numantina para que los rusos, en veintidós tras dos buenas rupturas, no consiguiesen el ensayo del empate. Éste acabó llegando, pero el árbitro no vio el posado y tras varias melés y fases ofensivas llegó el adelantado ruso que mató el partido y que pone a España a una victoria ante Rumanía de estar virtualmente en el Mundial.