Saint Preux salva el segundo match ball y Andrade asombra
El estadounidense sometió a Yushin Okami en sólo 1 minuto y 50 segundos. Además, Jessica Andrade lució en un gran combate y busca su oportunidad.
Ovince Saint Preux llevaba al UFC de Saitama (Japón) en el alambre. Había ganado su última pelea, pero había cosechados malos resultados con anterioridad que le ponían en una delicada situación. Debía ganar y convencer. Lo hizo, porque tras la caída por lesión de su rival inicial, Shogun Rua, debía ganar con claridad a Yushin Okami. No dejó dudas: le sometió en sólo 1 minuto y 50 segundos. El estadounidense salva su segundo match ball, ahora puede respirar más tranquilo, pero no confiarse.
El combate tuvo poca historia y estuvo marcado por un error de Okami. Llevó la pelea al suelo desde el inicio en el centro del octágono. Saint Peux se defiende bien y poco a poco le fue ganando la posición hasta que logró ponerle el hombre en su gargante. Un Von Flue de libro ante el que el japonés sólo pudo claudicar. OSP saltaba de alegría, importante victoria y sobre todo se convierte en el único luchador en ganar tres combates con esa llave. Un mérito más para no temer por su puesto en la compañía.
Jessica Andrade se llevó la pelea de la noche
Debido a la rapidez que que dio Saint Preux, el galardón de pelea de la noche fue para el duelo entre Jessica Andrade y Claudia Gadelha. Las dos buscaban una oportunidad en el peso paja, esperando a la próxima defensa de Joanna Jedrzejczyk en el UFC 217, y Andrade la logró con una lucida victoria a los puntos (30-25, 30-26 y 30-27) en tres vibrantes asaltos.
La brasileña dominó desde el inicio. Impuso un ritmo alto y fue percutiendo con dureza a su rival. Eso sí, para conectar esos golpes tuvo que encajar las duras contestaciones de Gadelha, que conectaba imponentes contras. Andrade fue buscando el cuerpo y comenzó a dominar en el grappling mediado el combate. Así fue restando oxígeno a Gadelha, quien no conectaba con tanta dureza... pero llegaba y también tuvo momentos en los que dominó el agarre. Andrade, aun así, fue mejor y ganó, pero ambas acabaron ensangrentadas en una épica batalla. Digna de una oportunidad por el título.
