EEUU aborta la remontada europea y retiene la Solheim
Hubo empate en los individuales del domingo y Salas firmó el punto decisivo. Décima copa para las norteamericanas, fraguada en los fourballs del viernes y el sábado.
No hubo remontada en la Solheim Cup. Tras dos jornadas desastrosas de fourballs el viernes y el sábado, el equipo europeo liderado por Annika Sorenstam no puedo darle la vuelta al resultado en los individuales del domingo y la copa se queda en Estados Unidos, a donde ya viajó desde Alemania en 2015.
El comienzo de la tarde fue un presagio de cómo iba a acabar el día: con empate. Lo firmaron la sueca Nordqvist y Thompson. Después vinieron dos victorias estadounidenses a cargo de Creamer (1 up) y Kerr (2&1), la heroína del sábado. Lo intentó Europa respondiendo con triunfos de la escocesa Matthew (1 up) y la alemana Masson (4&2), con un empate entre medias de Icher y Yin, pero en el partido siguiente Salas se impuso por un tanto a la inglesa Ewart Shadoff, y sumó así el medio punto que Estados Unidos necesitaba para retener la copa (y otro medio de regalo), dejando sin efecto los partidos que quedaban por delante. Estos acabaron con victorias europeas de la inglesa Hull (uno arriba), la sueca Sagstrom (3&2) y Carlota Ciganda (4&3) y estadounidenses de Piller (4&2) y Kang (3&1).
El resultado final fue de 14.5-9.5 para el equipo capitaneado por Julie Inkster, que evitó así un final apretado como el que tuvo la edición de 2015. Entonces Estados Unidos remontó cuatro puntos en los individuales para un ajustado 14.5-13.5 final. Había ganas de vendetta entre las europeas. Pero no fue posible y ya son 10 triunfos estadounidenses por 5 europeos desde que que se empezó a disputar la copa en 1990.