El descenso es cosa de tres: Cangas, Benidorm y Aranda

Antes de comenzar la penúltima jornada eran cinco los equipos amenazados con el puesto de descenso que resta por decidir. Con la derrota del Cangas en la pista del Ademar, el Puerto de Sagunto y el Bidasoa, que acabaron unos minutos después, estaban salvados a falta de una jornada, aunque ambos equipos ratificaron su salvación con victorias.

El triunfo del Puerto de Sagunto ante el Benidorm (24-22), que acalló cualquier suspicacia porque el empate les valía a los dos equipos, sirvió para despedir a lo grande a Tarrasó, que se retira del balonmano. Para el Benidorm, su futuro se decide el próximo sábado, en casa: le vale un punto ante el Puerto de Sagunto para seguir en la Asobal (incluso aunque pierda, si no gana el Cangas).

El Cangas peleó en la pista del Ademar, remontó y estuvo a punto de sacar un punto, aunque perdió por dos tantos, 32-30, y ahora ocupa una de las dos plazas de descenso con 18 puntos. Con otro arbitraje que hubiese marcado el pasivo cuando el Ademar perdía el tiempo sin atacar, los gallegos hubiesen tenido opción de puntuar, pero ahora están obligado a ganar el sábado próximo al Bidasoa, y esperar otros resultados.

El Bidasoa también se salvo remontando al Atlético de Valladolid (34-31), y podrá ir a la pista del Cangas sin mayor presión que la de conseguir un buen resultado. Por su parte, el Villa de Aranda, que ganó en Santander al Sinfín (27-30) respira: ya sólo depende de si mismo, y aunque en la última jornada recibe al Ademar, incluso perdiendo podría salvar la categoría.

Llama la atención la nueva derrota del Naturhouse, más que por perder, por la diferencia encajada en Granollers: 33-25. Pare el equipo riojano el final de Liga se está haciendo complicado, y los últimos patinazos sólo se explican si está preparando la Copa del Rey. En el Granollers, punto final a las carreras de Álamo y Ferrer, dos más que cuelgan la camiseta.

Nuevo empate del Ciudad Encantada de Cuenca, en la pista del Puente Genil (22-22), en un choque por ver si Rudovic era capaz de descontar la diferencia goleadora con Márquez, pero el español del Guadalajara fue el máximo goleador de su equipo (ocho tantos) en la visita a Cuenca lastrado por la lesiones, y pese a la derrota (30-26) el goleador aumenta su diferencia: 185 goles por 176, lo que le acerca al título de máximo goleador.

Y en Pamplona, fiesta del Anaitasuna pese a la derrota ante el Barcelona, al que tuteó durante muchos lances del encuentro: 22-28. Los azulgrana alcanzan la cifra de 120 partidos ligueros ganados de manera consecutiva.