Nick Foles escoge a los Chiefs por delante de los Cowboys
El quarterback, ex de Los Angeles Rams, ha tomado la decisión menos obvia al preferir competir contra Alex Smith sobre la opción de una lesión de Romo.
Nick Foles ha llegado a un acuerdo con los Kansas City Chiefs. El que fuera quarterback de Los Angeles Rams ha escogido su nuevo destino en un movimiento que debería poner nervioso a Alex Smith porque la única explicación que tiene es que se le haya prometido poder pelear por la titularidad.
Suena a broma en un grupo tan estable y firme como son los Chiefs. Andy Reid, su entrenador, ha instalado un sistema fiable que les ha permitido pelear por los playoffs las últimas temporadas. En la cima de la escala piramidal de esa maquinaria está Alex Smith que, como al equipo, nadie confundirá nunca con un jugador brillante y explosivo. Pero sí capaces de competir.
Esta temporada en Kansas City se han quedado sin el reserva de Smith. Chase Daniel se ha ido junto a Doug Pederson, anterior coordinador ofensivo en Kansas City, a los Philadelphia Eagles. Así que, con la sensatez que caracteriza a este proyecto, han convencido a Foles para que se les una. El propio QB fue elegido en el draft por Andy Reid cuando estaba en Philadelphia, así que entrenador y jugador se conocen de sobra y se respetan.
Pero aquí comienzan los problemas argumentales de este movimiento. Nick Foles pidió a Los Angeles Rams, su ex equipo, que le cortasen. No quería ser suplente de Case Keenum, y mucho menos ser suplente de suplente, pues los Rams han elegido con el número uno del draft a Jared Goff. Así pues, su lugar en esa plantilla era... ninguno.
En su declaración de principios para pedir la libertad estaba el ser titular en algún otro lugar. No es tonto, así que sabía que eso era un imposible. Ahora mismo, a estas alturas de los campos de entrenamiento, hay 32 franquicias de la NFL que no tienen hueco como titular para un QB como Foles. Así pues sus movimientos lógicos se reducían a dos: esperar a alguna lesión que le abriese las puertas de la titularidad o apostar por ser reserva en algún lugar donde aspirar a algo más que servir de compañero de charla en la banda.
En esas estaría el bueno de Nick cuando llegaron noticias desde el campo de los Dallas Cowboys: Kellen Moore se había lesionado y dejada un boquete en la plantilla. Es obvio que Tony Romo es el titular en Dallas, pero también es obvio que los Cowboys no pueden afrontar la temporada con Dak Prescott, el rookie de Mississippi State, como principal suplente. Es más, y ahí va una tercera obviedad, las opciones de que Romo se lesione en algún momento de la campaña no son pequeñas.
Así que sería un destino casi soñado para Nick Foles: reserva de Tony Romo. Una línea ofensiva maravillosa, un corredor explosivo que promete ser capaz de llevar el peso del equipo, un receptor estelar... y un QB titular mayor y propenso a las lesiones. Imposible decir que no.
¿Imposible? Pues, mira tú, un equipo con una estabilidad a prueba de bombas y un QB titular incuestionable, como son los Kansas City Chiefs y Alex Smith, se han impuesto en esta 'batalla'.
La única razón lógica para que haya tomado esta decisión es que Reid le ha guiñado un ojo. Que le haya dicho que si se esfuerza todo es posible, que si las cosas no salen del todo bien durante la temporada Smith no tiene el puesto asegurado, que en Kansas City la gente está cansada de tener un plantillón que se queda a medias y que, bueno, no debería descartar poder pelear por el puesto.
Eso sí sería como para irse a los Chiefs. Y en los Chiefs está. Uno de los proyectos más inmutables de los últimos años puede estar dando las primeras señales de movimiento interno. Son señales de baja intensidad, casi inapreciables, por supuesto, y que a un tipo se le hagan ojitos no significa que se le cuenten verdades como puños, pero si fuese Alex Smith vigilaría mi espalda.