NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Carolina Panthers

Cam Newton no podía ser portada del Madden 2017

El MVP de la temporada 2015, y quarterback titular de los Panthers que llegaron a la Super Bowl, provocó el rechazo general en su última aparición.

Madrid
Cam Newton no podía ser portada del Madden 2017
PERFORM

Newton lleva arrastrando un Sambenito desde que llegó a la NFL. Se ha definido de muchas maneras: egocentrismo, inmadurez, soberbia… De hecho, ese fue uno de los debates más repetidos en los días previos a la última Super Bowl: su capacidad para arrastrar a los aficionados, su falta (o no) de empatía, su intento evidente de ser simpático, de agradar.

Sin embargo, ha sido el protagonista de infinidad de campañas publicitarias. Y esa es la mejor prueba del algodón. Los publicistas, que antes de dar un paso consultan todos los estudios posibles, consideran que Newton es un buen reclamo para vender su producto y eso significa que el jugador mayoritariamente empatiza con la audiencia. No había discusión… hasta que se abrió la caja de Pandora.

Minutos después de terminar la última Super Bowl, sucedió algo que definitivamente inclinó la balanza del debate sobre el carácter del quarterback de los Panthers. En la comparecencia ante la prensa posterior a la derrota, Cam Newton se comportó como un niño caprichoso. Respondió con monosílabos, disgusto y mala cara, molesto por la situación, por las preguntas y por tener que estar ahí. De hecho, en un momento dado se levantó y se marchó sin mediar palabra.

La reacción fue infantil, ridícula, e incluso se ha convertido en un ejemplo de manual de lo que un deportista no debe hacer después de salir derrotado. Y lo peor de todo, lo que sacará a Cam Newton de muchas campañas publicitarias, y muy probablemente también ha provocado que fuera descartado de la portada del Madden, es que es la última imagen que tenemos de él en la retina. No ha tenido la oportunidad de saltar al campo en un partido posterior y remendar el entuerto con una explosión de simpatía, e intentando reencontrarse con el público con una disculpa.

Newton hizo lo que nunca hay que hacer: el ridículo en el punto y final, cerrar la campaña en la que fue elegido MVP y condujo el ataque de un equipo finalista, con dos minutos que mancillan todo lo realizado durante una campaña completa.

Por eso, a partir de ahora Newton tendrá que cargar con el vía crucis de una aparición ante la prensa que se convertirá en el primer argumento de los que critican que no empatiza con el público, que es un simpático de plástico y que le falta la frescura de lo auténtico.

Por mucho que cambie, y madure, siempre le recordarán el día en que respondió con desprecio y monosílabos al público, que ni tenía culpa de nada ni merecía ese trato. Y por eso es posible que, al menos a corto plazo, pueda perder mucho dinero en campañas publicitarias, cuyos estudios probablemente no recomienden su elección para ser la imagen de un producto.

Y también por eso será complicado que protagonice la portada del Madden… y más si tiene que competir con la popularidad de Rob Gronkowski.

Por qué ¿hay alguien que no adore a Gronko?