Dustin Johnson hace en el PGA otro inicio de 'major' brillante
Repitió liderato tras los primeros 18 hoyos, como en el US Open y en el British: firmó 66 golpes (-6). McIlroy y Spieth, -1. Sergio García, en par.
Dustin Johnson es hombre de primeros días de major. El estadounidense de Columbia firmó unos brillantes 18 hoyos iniciales en el US Open, en el British... y arrancó en -6 (66 golpes) el PGA Championship de Whistling Straits, el último grande de la temporada. “Lo vi todo muy fácil la verdad. Fui paciente y estuve concentrado. Me gusta estar arriba en la tabla”, decía DJ, después de marcarse cinco birdies y un eagle en el campo de Wisconsin, que se debate si es links o no, donde tuvo la fortuna de jugar con el viento calmado (por la tarde sopló más fuerte). El sueco David Lingmerth es su principal perseguidor, de momento: firmó una tarjeta con cinco por debajo del par (llegó a estar -6, pero un boogey a cuatro hoyos del final le privó de compartir el liderato).
Sergio García firmó una vuelta irregular en la que subió hasta -3, pero que dilapidó en los hoyos finales hasta acabar en el par del campo. Un resultado correcto para el de Borriol, que sigue en la contienda. “Sabor agridulce con mi 72 para empezar en condiciones complicadas que no mejoran por la tarde. Campo bueno y difícil”, tuiteaba Sergio. Peor les fue al resto de españoles: Cabrera-Bello (+1), Jiménez (+3) y Larrazabal (+7) acabaron por encima del par del campo.
La previa del arranque del torneo se había fijado en Rory McIlroy y Jordan Spieth, uno y dos del mundo respectivamente, como grandes atractivos del PGA. Sin embargo, la actuación de ambos fue discreta, lejana a los resultados de la cabeza: ambos finalizaron el recorrido con -1.
Mientras, Tiger Woods seguía naufragando con 75 golpes (+3). “Le pegué muy bien, pero hice una de las peores vueltas de mi vida con el putter. No consigo coger la velocidad de los greenes”, repetía el Tigre, cuyo nivel en los majors (y en general) sigue muy a la baja. Fue 17º en Augusta, pero no pasó el corte en el US Open, tampoco en el British y en Whistling Straits lo tendrá muy complicado.