Liga Asobal, 35-25
El Barça se entrena con el Anaitasuna de cara al Kolding
Nueva victoria azulgrana, con Karabatic otra vez en el equipo y con descanso para Noddesbo. Rutenka también jugó de pivote
El Barcelona sigue con su imparable marcha en la Liga Asobal tras superar esta noche al Anaitasuna de Pamplona (35-25), en un choque en el que estaba pensando ya en el trascendental duelo del próximo domingo en la Liga de Campeones frente al Kolding danés, con el primer puesto de grupo en juego.
En las filas azulgranas reapareció Nikola Karabatic, en su primer encuentro desde el Mundial de Qatar, y descansó Jesper Noddesbo, mientras que el técnico visitante dispuso en la convocatoria de todos sus efectivos, aunque Carlos Chocarro y Bozidar Nadoveza sólo jugaron en la segunda mitad.
Los navarros utilizaron un juego lento en ataque, del que se contagió el Barcelona en los primeros minutos de partido en los que, merced a las acciones de Juan Castro, los visitantes se adelantaron en el marcador (2-4, m.7).
Los azulgranas, con Dani Sarmiento muy efectivo, evitaron la escapada del Anaitasuna, que aguantó bien la ofensiva catalana (6-6, m.16). En ese momento empezaban las rotaciones de la primera línea barcelonista con la entrada de Víctor Tomás y Kiril Lazarov con Sharhei Rutenka colocado como pivote de ofensivo.
Tras dos tantos de Tomás y otro de Lazarov, Aniz pidió tiempo 9-6, m.19), pero ahí empezó el recital de Daniel Saric (13 paradas en la primera mitad), que Tomás culminó con tres tantos consecutivos (marcó seis en este primer periodo) para cerrar el primer tiempo con un claro 15-10.
El ritmo del encuentro se aceleró en la segunda mitad, con el Barcelona alternando la defensa 'seis-cero' con 'cinco-uno' en algunos momentos, con Victor Tomás como avanzado. Esto derivó en un monólogo barcelonista con contragolpes constantes de Gudjon Sigurdsson y poderosos lanzamientos de Rutenka y Lazarov que abrieron una brecha ya inalcanzable para los navarros (31-19, m.50). Xavi Pascual empezó a dosificar a sus teóricos titulares con la entrada de Aitor Ariño, Saubich, Gurbindo y el joven Oriol Rey, lo que permitió a los navarros mantener las diferencias.