Tiger enseña las garras, pero Jiménez le acecha

El Tigre Woods hizo honor a su apodo, enseñó las garras y provocó una 'montonera' a sus espaldas para impedir que vuelva a repetir en el British Open, el tercer grande la temporada y el más antiguo de los torneos de golf del mundo. Con Ernie Els pisándole los talones a un golpe, entre quienes siguen los pasos de Tiger Woods continúa habiendo un lince español que olfatea la jarra de plata en el Royal Liverpool de Holylake: Miguel Ángel Jiménez. Tras el segundo recorrido perdió comba (a cinco golpes), pero mantuvo sus opciones peleando contra la manada de favoritos que achuchará al estadounidense hasta el domingo. Algo más lejos, a siete, otros dos españoles: un sensacional Gonzalo Fernández-Castaño y un irregular Sergio García.

Suaves y sin viento como el día inaugural, los links (mirando al mar) del Lago Sagrado (Holylake) se mostraron caritativos a la hora de restarles golpes. Quien más se benefició fue Tiger, que salió a primera hora y lo bordó: apenas falló dos calles, se hartó de 'birdies' (6, por un solo 'bogey') y dio el disparo del día: 'eagle' en el hoy 14, embocando un segundo golpe ciego a bandera. Su 'caddie' reaccionó entregándole la bolsa de palos: "Maestro, coja los trastos, que yo no soy digno de llevárselos".

Antes que Woods apareciese en escena, Chris DiMarco ya había surgido del pelotón para marcarse el primero de los tres 65 del día (8 'birdies' y un 'bogey') que igualaba el récord del campo y le ponía líder provisional con -9. Luego salió el Tigre, y a punto estuvo del 64. Falló la salida en el 18 y, aunque recuperó con el tercer golpe, acabó con par para otro 65 y un -12 total que, a esas alturas, le supone tener medio British en el bolsillo. Afortunadamente, los que venían detrás apretaron los dientes y fueron a por él. En especial el sudafricano Ernie Els, otro con 65 (¡7'birdies'!) y su compatriota Retief Goosen (66). Más atrás, los españoles. Miguel Ángel Jiménez, que jugó antes que Woods, acabó con 70 (-2) para asentarse con un prometedor -7. Con Tiger ya en la casa-club, entró García con entusiasmo: 'birdie' en el 1, el 4 y el 8, a la espera de acercarse más en los nueve hoyos de vuelta. Pero pinchó ('bogeys' consecutivos en el 12 y el 13), no aprovechó los tres pares 5 y se quedó en 71, para un total de 139. Los mismos golpes de un magnífico Fernández-Castaño en su debut. A su 70, añadió ayer un 69 que le ponen en el gran grupo (más de diez jugadores) que están también con -5, con opciones para hoy.

Entre los resucitados, Chema Olazábal, que con un 68 palió su inicial 73 para un total de -3 (como un errático Mickelson). A falta de dos vueltas, eso le permite soñar. No a Ballesteros ni a Rodiles quienes, como se esperaba, no pasaron el corte.