El Desafío Español tiene un nuevo reto en Sicilia

Si Malmoe representó para el Desafío Español el pasar de ser un mero comparsa a tener un puesto entre los cuatro grandes de la próxima edición de la Copa del América en Valencia, Trapani debe representar su confirmación en esa élite. Es vital para sus aspiraciones en la Louis Vuitton Cup, el torneo de desafiantes del que saldrá el sindicato que se enfrentará al Alinghi suizo, vigente campeón, en 2007.

Once duelos en match race (barco contra barco) y cinco en flota (todos contra todos) deberán servir para confirmar la progresión española. El ESP-67 Iberdrola logró en Malmoe algo más que un cuarto puesto, empatado a puntos con el Emirates Team New Zealand. Se ganó el respecto de rivales como el BMW Oracle estadounidense o el Luna Rossa italiano, a quienes tuvo contra las cuerdas en sus enfrentamientos.

Luis Doreste, director deportivo del sindicato español, se dejó el miedo en su despacho de Valencia y el descaro, la agresividad y la rabia de los españoles sorprendió a propios y extraños. Un solo error ante el Victory Challenge sueco, con el que se han perdido los dos enfrentamientos en match race (asignatura pendiente que debe aprobarse en Trapani), y un excesivo desgaste de la tripulación (sólo se contó con veinte tripulantes en Malmoe) son los únicos fallos que pueden achacarse al Desafío.

Luis Doreste ha llevado a veinticuatro hombres para los actos que arrancan en Trapani, con lo que podrá realizar rotaciones en las posiciones de mayor desgaste.

El polaco Karol Jablonski y el santanderino Santi López-Vazquez, que podría debutar en esta faceta, serán los cañas del equipo en estos actos. El valenciano Jorge Ondo podría debutar tras los tres meses de entrenamiento que ha realizado con el equipo en funciones de coffee.

Agustín Zulueta, director general técnico-deportivo del Desafío Español, ha comentado que "me conformaría con acabar en el quinto puesto de la clasificación al finalizar los actos de 2005". Y como deseo para este acto siciliano pide derrotar al Victory sueco, el único al que no se ha batido.

Juan Carlos Ferrero, a bordo

El debut del ESP-67 Iberdrola tendrá lugar hoy mismo, y nada menos que ante el actual campeón en título de la Copa, el Alinghi suizo. El segundo enfrentamiento, también hoy, será ante el Victory sueco. En el barco español habrá un invitado de excepción: el tenista Juan Carlos Ferrero, que está disputando un torneo en Palermo. La presentación de los equipos en el puerto de Trapani, celebrada anoche, fue realmente espectacular. En el desfile, el Desafío Español fue introducido con la música del preludio de Carmen de Bizet y un gran castillo de fuegos.