"Alguno no creía en mí y dice ahora que podría ganar el oro"

Fotos, homenajes, recepciones... No para usted después de conseguir la plata.

Los reconocimientos son señal de que todo salió bien. Los aplausos son el fruto del trabajo de todo un año. No es algo que me entusiasme, pero lo hago todas las veces que haga falta.

Queda celebrar la fiesta en casa con los suyos.

Tengo que celebrar no sólo la medalla, sino todo el año, porque ha sido muy satisfactorio.

¿La temporada la calificaría de notable alto?

El balance es muy bueno. Empecé ganando en Mallorca, en la París-Niza fui segundo con victoria de etapa, luego obtuve triunfos en el País Vasco, una etapa en el Tour en mi primer año, segundo en el Mundial... He vencido en grandes carreras. Mejor, imposible.

¿Satisfecho con la plata?

Estoy contento, sí. Tras la lesión y tanto tiempo parado, tiene mucho mérito. Estoy más que conforme. Yo no soñé que iba a ser segundo, menos con un recorrido que no era el más favorable para mí. Además, hubo un momento en la carrera en el que creí que era imposible enlazar con los escapados.

¿Llevan razón aquellos que dicen que si hubiera esperado podría haber sido oro?

Me entrené muy duro y había quienes tenían dudas sobre mi estado. Mucha de esa gente que dudaba de mí dice ahora que podría haber conseguido el oro. He logrado la plata, se ha hecho muy bien y eso es lo importante.

¿Su gran objetivo para el próximo año será el Tour?

El Tour engancha mucho y el próximo año iré con toda la ilusión del mundo. Creo que este año hice un buen papel y en el futuro quiero repetir, pero no sólo para ganar una etapa. De todas formas, y aunque es nuestra prioridad, no podemos plantear toda la temporada en función de una carrera. Luego, una lesión o un simple resfriado te puede marcar el año.

¿Y las vacaciones?

Aún falta mucho para eso. De momento sólo pienso en lo que resta de temporada. (Disputará las clásicas de Zúrich, París-Tours y Lombardía, además de la Subida a Montjuïc).