Revolución o continuidad

No caben las medias tintas de cara al partido contra el Athletic y la solución del Real Murcia pasa por la revolución en el once inicial grana, aunque igual Peiró todavía se plantea después de tres jornadas de Liga en las que aún no conoce la victoria, aquello de darle la última oportunidad a algunos de los jugadores que por el momento no se muestra acertados. Hay debate en la capital con el equipo de gala que puede presentar el técnico, pero lo cierto es que el madrileño ya avisó que todos los partidos no son iguales y es más que previsible que diseñe su once en función de dos factores clave. Primero: Que necesita hombres fuertes en la zaga para frenar al temido Urzaiz. Segundo: Que al Murcia le falta gol y con el sistema empleado hasta la fecha, la producción ha sido más bien escasa.

Es un riesgo que tiene que correr el entrenador a estas alturas de la competición y no sabremos lo que es mejor o peor hasta que no termine el partido contra los vascos. La confianza en los jugadores, como todo en la vida, tiene su caducidad y ahora estamos frente a una situación en la que hay que pensar si esta está agotada o espira el domingo. ¿Juanmi o Sánchez Broto? La afición lo tiene claro, pero ¿y el entrenador?. ¿Qué ocurriría si Yeste o Tiko, especialistas a balón parado le hacen otro gol de falta al catalán?

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