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Europeo de Suecia | Lituania 93-España 84

Desencanto de plata

Lituania fue un equipo más maduro y agresivo que España. Gasol anotó 36 puntos, aunque falló ocho importantes tiros libres

<b>DESBORDADO.</B> Gasol firmó grandes número y un partido aceptable, pero Eurelius Zuskauskas le superó en momentos determinantes.
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El símbolo de la selección Lituana es la calavera despendolada y desvergonzada de los Grateful Dead: la Muerte Gratificante. El símbolo de la selección española, subcampeona de Europa, se llama Pau Gasol. Y ayer demostró que su futuro como jugador de impacto pasa por irse cuanto antes de Memphis, se ponga como se ponga Jerry West. Eso, pese a sus 36 puntos. O precisamente por ellos.

Lituania es campeona de Europa gracias a la desvergüenza agresiva de su lema, creado por Jerry Garcia, uno de los ídolos del gurú Phil Jackson. España tiene una plata que la lleva hasta Atenas. Nada malo. Pero, como también dice Phil Jackson, que lo ha copiado de Walt Whitman, "nosotros no debemos esperar a la buena fortuna. Nosotros debemos ser la buena fortuna".

Es fácil decir eso cuando se entrena a jugadores como Michael Jordan, Kobe Bryant o Shaquille O´Neal. Y, ¿por qué no puede ser Gasol, con sus condiciones infinitas, aspirar a ser eso que pregona Jackson y que suelen ser sus jugadores?

Respuesta: de momento, porque Pau está en Memphis, en un equipo que pierde 50 o 60 partidos al año, donde ya hace 20 puntos como rutina y donde los triunfos no acarrean ni el 10% de la tensión de los partidos decisivos en los grandes torneos de selecciones. Y, selección a un lado, Gasol no juega partidos decisivos, a vida o muerte, desde que lo hacía con el Barcelona, en la primavera de 2001: hace más de dos años. Jordan ganaba finales universitarias con North Carolina... a los 19 años. Con esta edad, Kobe Bryant ya se jugaba tiros decisivos en la NBA. Con 21, KB era campeón con los Lakers.¿Empiezan a tener claro por qué fue Navarro el que rescató a España ante Italia, y por qué el mismo Gasol falló ayer una pila de tiros libres en el corazón de la tensión?

Y, ¿vieron cómo Gasol resurgía cuando el partido ya estaba tan resuelto, en contra por supuesto, como suelen estar sus noches en los Grizzlies...?

Lituania. Dicho esto, explicaremos por qué ganó Lituania, cuya fluidez en ataque llegó a parecer la de los viejos Celtics: por buenos y por verdes. Por gobierno psicológico. Por adaptarse mejor al tono del arbitraje. Por mo-vi-li-dad. Por entrar como fieras a los rebotes de ataque, con o sin Gasol. Por chulos. Por la superioridad mental de Saras Jasikevicius, a quien sólo De la Fuente detuvo a ratos. Por...

Y por España, claro. Porque esta España que (casi sin Yugoslavia, ojo) ha mejorado un puesto desde el último Eurobasket y que va a Atenas, fue un equipo blandito, victimista que escogió el papel de presa. Lituania siempre fue el cazador. Debían haber recordado los españoles cómo salieron de la tortura italiana. A menudo, Navarro hace cosas imposibles, pero los milagros no siempre le salen.

Y con Gasol tan rodeado como estos días de Estocolmo, y con Navarro abocado al milagro permanente, Lituania, que daba y recibía sin pestañear, se fue marchando. El 21-20 fue la última ventaja española. De ahí, a 23-32. Y 31-40 en el descanso.

No había tiro exterior, lo que cerraba los espacios sobre Gasol, y la defensa se limitaba por miedo a los árbitros. Que nadie se engañe: los árbitros repartían las faltas casi a discreción. Sólo que los lituanos eran más listos y dosificaban mejor la gente a la hora de repartir.

En el tercer cuarto, España arrió bandera, mientras Gasol pasaba penas y fatigas con el gigantón Zukauskas y con la línea de tiros libres. Con el 48-62 del minuto 30, el desenlace estaba claro: porque España había perdido los tres cuartos.

En el último cuarto, apareció el Gasol de los Grizzlies: con 57-78, exactamente. Como suele pasar en Memphis. España se salvó de la paliza, pero la final se había ido. Jackson y Whitman tienen razón: no hay que esperar a la buena fortuna. Y la buena fortuna de Pau Gasol ya no está en un equipo perdedor.

LA FICHA:

93 - Lituania (20+20+22+31): Jasikevicius (10), Macijauskas (21), Mindaugas Zukauskas (7), Stombergas (9), Eurelijus Zukauskas (18) -cinco inicial-, Siskauskas (9), Songaila (10), Salenga (-), Lavrinovic (7) y Slanina (2).

84 - España (19+12+17+36): Calderón (5), Navarro (18), Jiménez (-), Garbajosa (17), Gasol (36) -cinco inicial-, Herreros (7), Marco (-), De la Fuente (1), Felipe Reyes (-), Bueno (-) y Grimau (-).

Arbitros: Lamonica (ITA) y Belosevic (YUG). Excluyeron por personales a Songaila (m.35), Macijauskas (m.36), Stombergas (m.36), Eurelijus Zukauskas (m.37), Garbajosa (m.39) y Mindaugas Zukauskas (m.39).

Incidencias: Final del Campeonato de Europa de selecciones nacionales masculinas 2003 disputado en el Globe Arena de Estocolmo ante unos 13.000 espectadores.