Ciclismo | Vuelta a España
Espantada macarra de Mario Cipollini
Insultó al fotografo de AS que le pilló escapando de su hotel a las 7:25 de la mañana
Mario Cipollini abandonó ayer la Vuelta a España a escondidas, con la complicidad de la noche (a las 7:25 horas de la madrugada). El campeón del mundo salía en ese momento del Hotel Cristina, en Noreña, cuando notó que un flash le sorprendía. Se trataba de la cámara de Jesús Rubio, fotógrafo de AS y único testigo directo de la Prensa.
Cipollini, contrariado, volvió a exhibir su conocida mala educación ante el profesional de AS. "¿Por qué me haces fotos?", preguntó el sprinter a la par que se escondía detrás de una columna. "Porque yo soy fotógrafo y tú, una estrella", contestó Rubio. Bien porque quería proteger a la joven acompañante que viajaba estos días con él, o bien porque es un macarra, Mario envió a Jesús "a tomar por culo". Luego se abalanzó sobre él, puso prácticamente nariz contra nariz, tensó el cuello, alzó el brazo amenazante y le gritó: "¡No! ¡Te he dicho que no!".
Así de triste fue la despedida de la Vuelta de Cipollini, un hombre que ya fue expulsado de esa carrera hace tres años por agredir con un puñetazo a Paco Cerezo. La marcha de Mario estaba cantada, porque ya había reiterado que no quería correr la ronda española y que no estaba en forma. Si al final ha venido fue porque el mánager del Domina Vacanze, Vincenzo Santoni, comprometió su presencia por escrito a la Vuelta sin el consentimiento del propio Cipollini. Por ello, Unipublic no está enfadado con el ciclista, sino con Vicenzo Santoni. En cualquier caso, tanta paz se lleve como la que deja.