Cantando bajo la lluvia un nuevo éxito de la cantera

Y se puso a llover. Sí. Cuando todo el mundo temía al intenso calor, Ponferrada amaneció nublada. Nada más llegar el viernes, ambos conjuntos vivieron la inauguración de la glorieta del cine. La organización del acto decidió emitir míticas bandas sonoras, entre las que no faltó Singing in the rain (Cantando bajo la lluvia). ¿Un presagio?

El líquido elemento fue el gran protagonista de la matinal. Cayó sin cesar. Parecía que San Pedro quería ser protagonista del partido. ¿Sería amigo de Sant Adrià?

La verdad sea dicha, nadie mereció perder el partido. Los españolistas hicieron un partido más que completo. En todos los sentidos. Verán. Mientras los jugadores de Ángel Pedraza se lo dejaban todo en el terreno de juego y el medio centenar de seguidores llegados desde Barcelona en autocar, parte del corazón y de sus voces, en la grada, José Mari, el lateral zurdo malacitano del equipo, no cesaba en sus rezos. Los dirigía a El Cautivo, el cristo de su ciudad. "Quiero irme con la medalla a casa. No sería justo perder", decía el andaluz. No fallaron sus oraciones.

El equipo disfrutó bajo la lluvia. Una victoria que hace grande a la cantera del Espanyol, aunque haya gente en las capas altas del club que no lo vean así. Pero eso es otra historia. Lo cierto es que la Copa ya descansa en Montjuïc.

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