En Sevilla, la quinta revolución de Iriondo

Iriondo volverá a revolucionar el equipo en busca de un electroshock para soñar con el milagro. Cuatro partidos lleva el técnico vasco al mando de la nave, cuatro equipos muy distintos ha puesto sobre el césped. Mínimo, tres cambios. Máximo, los cinco que podría haber en el Sánchez Pizjuán. Así: la baja de Bolo hará que Bolic, que había sido la primera apuesta de Iriondo y pasó al banquillo por su sequía, vuelva al once. Lo mismo podría ocurrir con el meta Segura, en el equipo titular si Etxeberria, que no se ejercitó ayer por una tortícolis, no acaba de recuperarse de sus problemas físicos. Los que sí han superado sus dolencias son Azkoitia y De Quintana, y por ello entrarán al campo. Para rematar, la inclusión de Iriney en un once que puede tener hasta cinco cambios con respecto al que empató contra el Betis.

Un récord, pero nada nuevo. Cuatro cambios en el once contra el Espanyol provocó la debacle (5-0) en Anoeta con la que debutó Iriondo. Tres sustituciones, el 0-3 periquito. Otros cuatro cayeron después de sucumbir en el Camp Nou y tras el empate a uno ante el Betis se plantea la última revolución de Iriondo, quizá la más seria. Y mientras Peragón, que estará entre los elegidos esta vez, no cierra las puertas a la permanencia: "Hay que dar un mensaje de optimismo porque ganando al Sevilla después tenemos partidos contra rivales directos".

La plantilla se volvió a reunir

Plantilla, cuerpo técnico y directivo del Rayo se volvieron a reunir el miércoles en Somosaguas en una terapia de grupo que incluyó paella y sermón de Álvaro Ruiz Mateos. El director general del Rayo volvió a insistir en que hay tiempo para seguir en Primera División si se logran ganar los cinco partidos que quedan y alentó a los suyos ante la mala situación que atraviesan.