Primera | Barcelona
Riquelme: "Todavía no di lo mejor de mí"
Tras su exhibición ante el Racing, el argentino promete ir a más
Demostrado. Román Riquelme sabe jugar al fútbol. Demostrado. Román Riquelme sabe reír, timidamente, pero lo hace. Demostrado. Román Riquelme acepta retos importantes. Y avisa: "Lo mejor está por llegar al Camp Nou, porque todavía no di lo mejor de mí". Al fin, un punto de luz en la vida del argentino, que comienza a gustarse después del ostracismo que vivió cuando Louis van Gaal reinaba en el banquillo del Camp Nou.
Pese a las buenas críticas recibidas tras su partido ante el Racing (6-1), el medio no se mostró muy radiante. Al contrario. Lució ese punto de autocrítica que deben tener los elegidos. "Me gustó más el partido que jugué ante el Newcastle, donde participé en mi lugar predilecto. El domingo lo hice en la zurda. Lo que parece claro es que llegué al Barça por mi forma de jugar en Boca, y eso no lo puedo cambiar", afirmó.
Desde que llegó Antic al Barça, los seguidores culés aún no han visto perder a su equipo. El serbio, consciente del mal momento anímico por el que pasaban, quiso quitarles presión y les mentalizó para que se dedicaran a jugar. Y así ha sido. Este dato no ha pasado inadvertido por Riquelme. "En la Champions siempre jugamos a un nivel muy alto; en Liga, el papel del equipo no fue tan regular", explicó Román.
Bianchi. Por si fuera poco, Carlos Bianchi, el que fuera entrenador de Riquelme en Boca, comentó en los micrófonos de la COPE que "Román es un jugador que ve las jugadas tres tiempos antes que otro jugador. Es muy parecido a Zinedine Zidane y para verle jugar bien, sólo hay que encontrarle su posición. Y eso parece que se está haciendo".
Elogios a Zinedine Zidane
Amante del buen fútbol, Román Riquelme no se perdió la asistencia que Zinedine Zidane le dio a Ronaldo, en la victoria de los blancos ante el Deportivo de La Coruña. "Lo que parece difícil, Zidane lo hace fácil. Hace cosas increíbles", aseguró el azulgrana. En pocas semanas, en el Bernabéu, Riquelme verá al jugador blanco. Será un espectáculo para los aficionados. La magia está servida.