Europeo 2003 | España 3-Portugal 3

Amargo arranque de España en el Europeo

De un 2-0 de la primera mitad, Portugal dio la vuelta al partido y al final el empate a 3-3 casi resultó un éxito

Alejandro Alcázar
EFE

Un minuto de empanada y un despiste defensivo en los comienzos de la segunda parte, arruinaron el buen trabajo realizado en los primeros 20 minutos. Al final España consiguió un empate y un respiro, ya que pudo ser peor, aunque en el cómputo global mereció mejor suerte, pero volvió a tropezar en la misma piedra: atacar una defensa cerrada en diez metros y acumular errores por falta de magia que la privaron del triunfo.

La tensión presidió el arranque. Un pulso abierto por tener la pelota en que valía todo para los lusos. Los españoles, acostumbrados a la pelea, ni se inmutaron; no cayeron en la trampa que les ofrecían y prefirieron ir a la suya, a jugar la pelota.

Los goles. Cuando los portugueses bajaron un poco su ritmo apareció ese grupo incisivo para marcar dos goles casi seguidos. Un 2-0 que auguraba un triunfo sencillo, pero España salió descentrada en la segunda mitad. Confiada por el marcador y por haberse mostrado superior, pero Portugal estaba viva y en 40 segundos empató ante una España que no acababa de arrancar.

Lozano empezó a mover el banquillo, pero no había ideas, lo que aprovecharon los lusos para adelantarse en el marcador con un latigazo que dejó helados a todos. Afortunadamente Portugal renunció al ataque y se parapetó en una defensa magistralmente. Incluso cuando jugó con tres por expulsión de Iván se defendió bien, aunque mucha culpa tuvo también España por su falta de lucidez.

España echó el resto, más por afán que por sabiduría, fallando en la definición. Afortunadamente se hizo bueno eso de tanto va el cántaro a la fuente... y fue Orol el que le pegó un punterazo al cántaro que lo rompió. Era el 3-3 y quedaba tiempo para aspirar al triunfo, pero no era el día de los nuestros y sí el de los portugueses que ayer crecieron un metro cada uno en autoestima.

El empate al menos sirve para mantener todas las aspiraciones, pero que en realidad sabe a muy poco y origina un cajón de dudas en la credibilidad de esta Selección, que esperemos sean pasajeras.

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