Ánimo y razones contra el jet-lag
Fernando Hierro (con la cara tristona que usa en sus declaraciones públicas) ha dicho que se valoran poco las grandes hazañas del Madrid, esta Copa Intercontinental, por ejemplo. Claro, amigo Fernando, que en Europa suena más la Champions que la Intercontinental, aunque ambas valgas mucho. Es cuestión de diferentes cultura deportivas. Pero los tiros van por otra parte. A un equipo como el Madrid, que vive en la épica del 10, ¿qué le van a pedir los aficionados, los leales, el 5 de los probos oficinistas? No, al Madrid sólo le cuadra el 10 de los héroes, y eso es lo que se le va a pedir siempre para eso es el Real Madrid aunque todos sepamos, pensándolo, que el 10 continúo ni es posible, ni humano. Pero al Madrid no se le puede suponer otra cosa.
Aunque ahí esté el jet-lag (los puristas de la lengua aconsejan que se diga desfase horario) ese malestar arrítmico que causan los largos viajes transcontinentales. Iván Helguera anda preocupado con su dificultad para conciliar el sueño. Y parece que buena parte del equipo cree y comenta que el jet-lag difícilmente controlable les pasará factura en el partido del domingo contra el Mallorca. Es posible, pero para eso está el temple heroico. El brillo de las copas y de las Ligas. La grandeza de un gran equipo... El jet-lag es un horror (quien lo probó lo sabe) pero al Real Madrid hay que exigirle todo, otra vez, porque por eso son héroes. ¿Y qué será un avión para una estrella? Pan comido.