Kevin McDowell: Vencer al cáncer para estar en Tokio 2020
El atleta estadounidense, a punto de entrar a un gran momento de su carrera, tuvo que detener todas sus aspiraciones y trabajó para estar hoy frente al mundo.
En estos momentos, Kevin McDowell se encuentra corriendo por una de las batallas más importantes de los últimos años. Sin embargo, su participación en el triatlón de Tokio 2020 no es la pelea más grande de su vida, ya que esta la pasó hace diez años, cuando, a punto de ir al mundial junior de la disciplina, éste fue diagnosticado con un cáncer que lo alejaría de sus sueños.
Tras su participación en los Juego Olímpicos juveniles de Singapur 2010, el estadounidense recibió la noticia de que padecía el linfoma de Hodgkin y su reacción no pudo ser otra: “Recuerdo el preguntar si iba a vivir, cuál era el diagnóstico y por uno o dos días no supimos qué iba a pasar. Cuando recibimos la noticia de que era ese linfoma, celebramos porque es uno de los cánceres más curables. Así que, aún sabiendo que el camino iba a ser largo para vencerlo, con una quimioterapia muy intensa, iba a poder vivir”.
Cal’s Angels fue la organización que lo acompañó en este camino y, así como fue tomando su tratamiento, también fue acercándose a los momentos de entrenamiento. Por su puesto que a momento su cuerpo no respondía de la misma manera, pero esto no lo detuvo y simplemente siguió trabajando hasta que venció a todos, desde la enfermedad como a él mismo.
“(Cada mal día se dice) Has pasado por mucho más que esto. Antes estabas a la orilla de tu cama, muy enfermo, pasando por las quisimos y solamente deseando poder estar afuera, soñando con poder estar aquí. No sólo compitiendo y viviendo, sino estando al máximo nivel y creando una carrera. Vuelvo a pensar en esos tiempos y sé lo afortunado que soy de poder estar aquí”, comentó para el equipo de USA Triathlon.
Pasar por esos eventos no son nada fáciles de superar, de querer seguir peleando por lo mejor. Sin embargo, la vida recompensó su esfuerzo y hoy corre en el Parque Marítimo de Odaiba: “Las lágrimas salieron de inmediato (cuando me dieron la noticia). Temblaba y preguntaba si esto era real y fue como “esto está pasando”. Fue un mar de emociones”.
Ir a los Juegos Olímpicos no sólo se trata de presentarse
Uno de los mayores logros en la carrera de los deportistas es llegar a un curso de élite como los Juegos Olímpicos. Además, hasta el día de hoy, desconocemos a uno sólo que no piense en ir a ganar medallas y por eso McDowell sabe que si hoy está ahí, es porque la única meta es una presea: “(Hay que) competir en lo más alto, estar en la mejor posición individual posible, pero también creo que tenemos una gran oportunidad con el equipo mixto. Vamos con la mira puesta en el oro”.