Weissman, un hombre feliz

Shon Weissman (14 de febrero de 1996, Kiryat Haim, Haifa, Israel) es un hombre feliz. Así se presentó en Los Cármenes como nuevo jugador del Granada. “Estoy muy feliz, no puedo esperar a jugar, sólo quiero empezar. Estoy aquí porque Nico, Alfredo y el míster me querían, por eso he venido. Tengo mucha hambre de jugar para este equipo”, fueron sus primeras palabras como jugador nazarí. El hebreo se atrevió a contestar a todas las preguntas en español, siempre sonriendo.

“Estoy aquí porque han mostrado un gran interés por que viniera”, recalcó el jugador cuando le preguntaron por qué había elegido Granada. El israelí tenía claro que vendría a la ciudad de la Alhambra: “El proyecto me gusta mucho y a mi familia le gusta. Es un club grande e histórico. Estoy aquí para hacer todo lo posible para lograr el objetivo”. De sus primer día en Granada, Shon desveló poco: “Paco y yo hablamos pero es una cosa nuestra”. Y se mostró como un soldado más para el técnico nazarí: “Prefiero jugar a lo que el míster quiere. Estoy aquí para jugar como él quiera este domingo”. “Tengo mucha hambre de jugar en este equipo”, sentenció.

Además, el delantero alabó a sus nuevos compañeros de ataque, sobre todo José Callejón y Myrto Uzuni: “Uzuni y José tienen mucha calidad, es el máximo goleador. Sólo quiero jugar y marcar goles y después te digo cuantos goles puedo marcar”.

Polémica en Valladolid

Su salida ha dejado un vacío a la afición del Valladolid, que no le ha gustado nada que Weissman se fuera de pucela. De hecho, Fran Sánchez, director deportivo vallisoletano, habló la salida del delantero desvelando que fue él el que pidió salir hasta en dos ocasiones: “No quiero hablar de lo que pasó en Valladolid. Tengo el foco puesto en el Villarreal. Gracias a la afición del Valladolid, han sido dos años y medio, no es poco tiempo, a mí me gustan ellos y yo les gusto, sólo puedo agradecerles ese cariño”