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ALAVÉS

Vitoria se echa a la calle

Miles de aficionados celebran en el Casco Viejo la consecución del ascenso. La parte vieja de la capital vasca se llenó de brindis, cánticos, bailes y celebraciones

VitoriaActualizado a
Aficionados celebrando el ascenso a Primera
L. RicoEFE

Más de 130 minutos de sufrimiento para terminar con una explosión de júbilo. Miles de personas se agolparon en las calles del casco viejo para celebrar que el Glorioso estará el año que viene en Primera. “Villalibre, Villalibre...”, “a Primera, oe, oe...” o, directamente, el himno, fueron las canciones más entonadas en la calle Cuchillería de la capital alavesa. La gente, de todas las edades, sudaba, se abrazaba, se mojaba por dentro y por fuera mientras comentaban donde habían visto el partido y como habían sufrido con la decisión del VAR y el lanzamiento de la pena máxima.

Atónitos con el ambiente, una cuadrilla de despedida de solteros de Logroño. “Me caso dentro de seis días si la novia no se lo replantea. Hemos venido a pasar el día aquí y menos mal que hemos cogido hotel. Yo soy de la Unión Deportiva Logroñés y estos desgraciados me han regalado una de la Sociedad Deportiva. La verdad es que, a partir de ahora, seremos todos un poco del Alavés. Hemos visto el partido por los bares y al final nos hemos contagiado y hemos animado al equipo de Vitoria”, decía el novio.

A medida que avanzaba la noche, la fauna del fútbol se empezó a mezclar con los aficionados a la música. Durante todo el fin de semana, Vitoria está acogiendo el Azkena Rock Festival, con presencia de grupos como The Pretenders o Iggy Pop y las elásticas albiazules se cruzaron con las cazadoras negras y los brazos tatuados. La noche fue muy larga y muchos seguidores del Alavés hicieron tiempo para acudir al aeropuerto de Foronda y recibir a un equipo que se propuso subir a Primera y lo acabó consiguiendo.

Mañana será un día de descanso y recuperación pero el lunes volverá el jolgorio a las calles de Vitoria. A eso de las 20 h. tendrá lugar el recibimiento popular en la Plaza de la Virgen Blanca, lugar en el que todos los 4 de agosto baja la figura de Celedón para anunciar el inicio de las fiestas. Cerca de 30.000 personas darán el cálido homenaje al cuerpo técnico y a la plantilla. Luego, por la noche, tendrá lugar la cena de despedida de la plantilla e, inmediatamente, las vacaciones. Luego llegará el momento de analizar el futuro del Director Deportivo, Sergio Fernández, del entrenador Luis García Plaza y de todos los futbolistas.