Una delantera de pegada mundial

El problema del gol está más que resuelto esta temporada en Bilbao. La definición fue un quebradero de cabeza para Marcelino en San Mamés y en muchas fases de la pasada temporada con Valverde. Pero el Athletic ahora mismo es una máquina de anotar, el cuarto equipo de la Liga más realizador, con 36 dianas en 19 compromisos, es decir, en el ecuador del campeonato. Casi dos por encuentro. Todo parte de la presión alta del equipo, con robos cerca del área rival, y de la verticalidad que tienen cuando cuentan con la posesión.

El buen momento de Gorka Guruzeta, que acompañó al equipo a Eibar aunque estaba fuera de convocatoria por un proceso febril aunque hoy ya se ha ejercitado en Lezama, eclipsa casi todo lo demás. Lleva ocho goles, los mismos que Iñaki Williams, ahora con Ghana para jugar la Copa África, y Villalibre suma 5 con el doblete de ayer. Los hace a pares, ya que ante el Cayón también sumó dos. En Liga anotó al Cádiz. No quiso celebrarlos. Ya se sabe que es un tipo peculiar, si en la anterior ocasión fue por un problema familiar, ayer adujo que eran goles a los que se puede otorgar poco mérito y se trataba de un rival vasco con gente conocida. Muniain tuvo otra actitud, está perdiendo protagonismo día a día, pero fue el primero en alegrarse por el gol de Unai Gómez in extremis a Las Palmas y por el tanto soberbio de ayer girándose y mandando con la zurda a la escuadra de Yoel. El fútbol es un estado de ánimo y la actitud del Búfalo resulta extraña y poco aconsejable.

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Raúl García es el único nueve que aún no se ha estrenado en el Athletic. Villalibre ha jugado poco, pero lo está aprovechando bien. Suma 163 minutos en la Liga y 179 en Copa, 8 contra el Rubí, 90 con el Cayón y 81 ayer. Eso arroja un tanto cada 70 minutos. Ha firmado diez remates, seis a puerta y ante el Eibar completó un 92 por ciento de efectividad en el pase. Ayer dejó claro que no va a salir, aunque hay varios Primeras y muchos Segundas llamando a su puerta. Sin ir más lejos, Etxeberria lo quería a su lado. Es el gran verdugo del cuadro azulgrana: le ha metido una manita en tres compromisos en un año natural. En su estreno como jugador del alavés el 4 de febrero de 2023 en Mendizorroza fue el autor del 2-0, hizo otro en junio en la vuelta del playoff ante los de Garitano y sumó ayer un nuevo doblete. Ha jugado otros seis compromisos oficiales ante los vecinos, y el 17 de junio de 2020 también perforó su meta, como rojiblanco, en un 2-2 final. Por otro lado, en la sesión de esta mañana se han vuelto a ejercitar con normalidad Yeray y Dani García.

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