Un pueblo de Segovia y su singular calle: Athletic Club Kalea
La Peña Rojiblanca de Barbolla lanzó la propuesta al alcalde de la localidad y este fin de semana han celebrado el cambio de denominación
El fútbol muchas veces lo puede todo. Y hasta mueve denominaciones oficiales, La pequeña localidad segoviana de Barbolla situada muy cerca de la carretera que conduce a Madrid, alberga poco más de cien habitantes durante los meses de invierno. De ellos, cerca de 60 pertenecen a la Peña Rojiblanca de Barbolla. Uno de ellos es el alcalde del pueblo, Basilio del Olmo. Y él ha sido el encargado este pasado fin de semana de inaugurar la Athletic Club Kalea. Es la nueva denominación oficial de la hasta ahora calle Extramuros.
Es la calle donde se encuentra ubicada la sede esta peña del Athletic, creada hace cerca de dos décadas por un puñado de seguidores del conjunto rojiblanco que decidieron organizarse para animar, desde la distancia, a su equipo del alma. En poco tiempo consiguieron reunir a varias decenas de vecinos y desde entonces no han dejado de festejar sus colores rojiblancos. La Peña de Barbolla está hermanada con la de Gamiz-Fika desde hace tiempo.
El acto de inauguración de la Athletic Club Kalea ha contado con la presencia de todos ellos, que no han dudado en entonar en formato txaranga el himno del Athletic. Además, el guiño a Bilbao se ha extendido al diseño de la placa, que es idéntica a las que indican las denominaciones de las distintas calles de la capital bizkaina. Otra forma más de demostrar que la afición del Athletic llega mucho más allá de las fronteras geográficas de Bizkaia.
Cada año, sus miembros aprovechan el aniversario de la fundación de la peña para celebrarlo por todo lo alto. En 2019, por ejemplo, y de nuevo con el alcalde Del Olmo como anfitrión, homenajearon al primer equipo femenino del Athletic y contaron, entre otras, con la presencia de la histórica leona Eli Ibarra. Y no fue el único gran acto que organizaron. Un año antes, en 2018, consiguieron reunir en Barbolla a 27 peñas del Athletic. Hasta allí se desplazó un autobús de seguidores del equipo que pudo disfrutar de un día completo en rojiblanco: aurresku de honor, poteo, dantzaris y, cómo no, una comida de hermandad que se alargó hasta el final de un día inolvidable para los peñistas athleticzales de Barbolla.