Ser entrenador del Málaga es una profesión de alto riesgo
Pablo Guede tiene toda una prueba de riesgo el próximo lunes en Tenerife. El Málaga CF ha tenido 28 entrenadores desde 1994.
No es ningún secreto que Pablo Guede está muy cuestionado por una significativa parte de la afición como entrenador del Málaga. El equipo no está respondiendo a las expectativas desatadas a tener de sus importantes fichajes y es penúltimo en la clasificación con solo un partido ganado y cuatro perdidos. Un momento delicado.
¿Qué puede suceder si el Málaga cae el lunes en Tenerife? No podemos asegurar que el técnico argentino vaya a ser destituido. Pero tampoco que no lo vaya a ser. Una quinta derrota aumentaría el nivel de malestar entre el respetable y aumentaría las malas vibraciones en La Rosaleda con la visita del Villarreal B… con Javier Ontiveros.
Profesión de riesgo
En descargo de Pablo Guede, más allá de las delicadas circunstancias que está viviendo, debemos decir que ser entrenador del actual Málaga Club de Fútbol es una profesión de alto riesgo. Desde que Antonio Benítez inició la andadura de este equipo, heredero del desaparecido Club Deportivo Málaga han pasado 28 entrenadores. De todos ellos han completado al menos una temporada, además de Benítez los siguientes técnicos: Joaquín Peiró, Juande Ramos, Juan Ramón Muñiz (en dos etapas diferentes), Antonio Tapia, Manuel Pellegrini, Bernd Schuster, Javi Gracia y Sergio Pellicer. Solo nueve.
Y todos ellos las han pasado canutas en algún momento de su trayectoria. A Benítez le cesaron tras ascender al equipo de Tercera a Segunda en una jornada 13 porque el equipo, construido a golpe de talonario para ascender de carrerilla, iba cuarto. En la 1996-97 el entonces presidente Federico Beltrán trajo a José Manuel Díaz Novoa. Un técnico de prestigio que decepcionó y enfadó a la grada; Ismael Díaz fue ‘largado’ al día siguiente del ascenso a Segunda; Peiró se salvó de dos ceses; en Segunda le salvaron dos goles de Basti y en Primera un triunfo en el Camp Nou ante el Barcelona con los recordados goles de Agostinho y Valcárce. Hoy es reconocido como uno de los entrenadores mejores y más queridos por el malaguismo de todos los tiempos.
Manuel Pellegrini iba a ser también despachado tras dos derrotas seguidas contra Real Madrid (7-0) y Osasuna en casa (0-1). El club contactó con Juande Ramos para relevar al chileno. La suerte cambió y el Málaga se libró del descenso y al año siguiente se metió en la Champions. Al Ingeniero también le cayeron pintadas hirientes. Ahora tiene una rotonda con su nombre cerca del estadio. La grada cogió manía a Schuster por un gesto del alemán que no gustó.
Javi Gracia fue mal recibido porque venía de descender con Osasuna a ser uno de los técnicos mejor valorados por la gente al igual que Víctor Sánchez del Amo, defendido tras su abrupta salida. Michel pasó de ídolo salvador y motor de una campaña de captación que trajo 24.000 abonados a sentenciado por una calamitosa racha de resultados que fue empeorada con José González. Sergio Pellicer también es otro de los entrenadores mejor vistos en este tramo de tiempo por obtener dos milagrosas permanencias con una plantilla mermada por el límite salarial.
¿Qué pasa con Guede? Es evidente que la generación que vivió el doble ascenso de Segunda B a Primera entre 1998 y 1999 recuerda su garra, compromiso y malaguismo inquebrantable. Pero muchos no le vieron jugar y le juzgan por los malos resultados actuales como entrenador. El próximo duelo en el Heliodoro Rodríguez tiene pinta casi dramática pese a ser solo la sexta jornada.