Incapaz de marcar después de más de 150 minutos con superioridad numérica

La estadística es difícil que tenga algún precedente porque no es normal que un equipo se encuentre en tres de los cuatro últimos partidos de competición con la ventaja de jugar un montón de minutos con un hombre más por expulsión de algún rival. Pues en esa circunstancia se ha encontrado el Sporting de Miguel Ángel Ramírez que, sin embargo, no ha sido capaz de sacar provecho de la situación.

En concreto, el Sporting se ha encontrado en las últimas cuatro jornadas con algo más de 150 minutos con superioridad numérica sobre el campo sin que haya podido marcar un solo gol. Uno de esos partidos acabó en derrota en Leganés y, para sorpresa de todos, Ramírez encontró después en esta circunstancia una de las explicaciones a no haber podido salir de Butarque con al menos un punto. “La expulsión te cambia la hoja de ruta porque no preparas el partido contra uno menos”, dijo.

El primero de esos partidos fue en el debut liguero del propio Miguel Ángel Ramírez en el banquillo del Sporting. El rival era el Real Zaragoza y en El Molinón. El equipo gijonés marcó de inicio y a los seis minutos se encontró con la expulsión de Tomás Alarcón. A partir de ahí, el equipo rojiblanco no fue capaz de ampliar la ventaja en el marcador de un partido que acabó ganando por la mínima (1-0), sufrió incluso la presión de un rival con uno menos e incluso con dos menos en los 20 minutos finales porque el conjunto aragonés sufrió una segunda expulsión (Carlos Nieto). En total, 90 minutos –incluido el tiempo añadido—en superioridad.

A la jornada siguiente llegó el empate sin goles con el Málaga, también en casa, y sin expulsiones esta vez. Pero la situación se repitió en la primera salida del Sporting con Ramírez en el banquillo. Fue en Leganés. Allí perdía 1-0 el conjunto asturiano por un gol tempranero de los locales, pero es que corría el minuto 35 cuando el árbitro expulsó a Gaku Shibashaki. Por delante, 55 minutos con uno más, que se quedaron en 50 porque Guille Rosas vio la roja que volvió a igualar las cosas.

Y el último caso se ha dado esta pasada jornada, aunque el Sporting tuvo poco tiempo para aprovechar esa ventaja, solo 11 minutos. El equipo de Ramírez, volcado sobre la portería del Huesca, tampoco pudo marcar y se tuvo que conformar con el empate.

El Sporting quiere alejarse cuanto antes de la zona peligrosa de la clasificación pero la falta de gol es el principal problema. Los rojiblancos no acaban de encontrar la portería rival incluso disfrutando de muchos minutos con un jugador más sobre el campo.