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CONFERENCE LEAGUE

Se estrecha el cerco sobre Osasuna: nueva sanción de la UEFA, esta vez en San Marino

El organismo europeo excluye al Virtus de sus competiciones por apuestas ilegales en 2017. Crece el optimismo el Athletic por la Conference.

La Copa del Virtus

Osasuna espera conocer la semana próxima el dictamen de la UEFA tras el expediente abierto estos días por los amaños de partidos practicados en la temporada 2013-14. El equipo rojillo acabó séptimo la pasada Liga y se ha ganado el derecho a volver a Europa 18 años después, en concreto a la Conference League, pero puede borrarse esa ilusión en los despachos. El Athletic está a la espera y crece el optimismo. Si la UEFA aparta a los navarros de sus torneos, el puesto sería para los bilbaínos, que acabaron inmediatamente por debajo. La entidad que preside Sabalza ya ha aportado un dossier para defender sus intereses. El propio presidente ha puesto el grito en el cielo por la posibilidad de verse perjudicados tras un proceso en el que se presentaron como parte acusadora.

El amaño en un partido con el Betis hace una década cuenta con una sentencia del Tribunal Supremo, y eso pone las cosas muy complicadas en El Sadar. No hay buenas vibraciones, aunque se agotarán las vías jurídicas, hasta el TAS, en caso de denegarse su inscripción en la Conference. Los presagios son muy malos, especialmente atendiendo a la sanción conocida esta semana al Isloch de Minsk por un caso muy similar al suyo. Los bielorrusos se ganaron su derecho a participar en la Conference League y se han quedado fuera por un tema de amaños acaecido en 2016. Y hay más. El Virtus de San Marino ha sido también tachado por un tema de apuestas ilegales en 2017 en un choque ante el San Giovanni que salpica a jugadores y dirigentes. El mismo club se había puesto disposición para que la entidad que preside Ceferin tome su decisión. El equipo de Acquaviva se había coronado campeón de la Copa Titano por primera vez en su historia tras su victoria por 3-1 ante el Tre Penne e iba a hacer su debut absoluto en competencias de la UEFA. La Virtus se mostró decepcionado en un comunicado y lamentó la exclusión de un equipo que hace algunas semanas vivía el momento más importante de su historia: “Respetando la elección del máximo organismo del fútbol europeo, el club no puede más que lamentar que se le impida participar en la cita continental, derecho que Virtus se ha garantizado con todo merecimiento sobre el terreno de juego. La única culpa fue confiar en personas que, con decisiones discutibles, violaron las reglas del deporte y la lealtad humana, empañando el nombre de nuestra Sociedad”. Los verdinegros reflejan que, con esta decisión de la UEFA, “esperamos haber puesto una lápida en esa historia ya desaparecida, que ahora queremos dejar atrás definitivamente”. “De esa situación nos volvimos a levantar, partiendo de cero y poniendo en marcha un proyecto que en pocas temporadas nos hizo desafiar a los mejores equipos del fútbol de San Marino en igualdad de condiciones, hasta la estupenda victoria del 27 de mayo. Puede que necesitemos unos días para superar esta decepción, pero estaremos aún más motivados en la planificación de la próxima temporada, en la que el equipo será aún más competitivo para seguir siendo protagonistas y coronar por fin nuestro sueño europeo. Un sueño que esta vez nadie nos podrá quitar”, finalizan.

Se espera una resolución inmediata en el caso de Osasuna. Si se produjera una sanción tras el 7 de agosto, cuando se celebre el sorteo de la eliminatoria de playoff, Osasuna entraría en el bombo y el beneficiado para estar en la fase de grupos sería su rival. Como les sucedió a los rojiblancos en su cruce con el Trabzonspor en la Europa League de 2011. Se jugó la ida, pero no la vuelta. El martes 20 de junio se sorteará la primera ronda previa y el miércoles 21, la segunda; y el balón echará a rodar de manera oficial el próximo 13 de julio. Mientras tanto, Osasuna y Athletic aguardan de cara a la planificación de sus plantillas porque no es lo mismo disputar dos o tres competiciones.

En Pamplona sostienen que todo este proceso se ha desencadenado tras una denuncia y los dedos acusadores se dirigen a Bilbao. El director general rojiblanco, Jon Berasategi, ya lo dejó claro recientemente: “Yo tengo conocimiento del asunto. Se lo transmito al presidente a través del jefe de prensa, que me manda una comunicación de los medios y luego leemos la nota de Osasuna. No hay nada, rotundamente falso”.