Se abre la veda en las oficinas de Ipurua
Un total de nueve jugadores serán libres para negociar con otro club a partir del uno de enero. Jonmi, Corpas, Mada y Guruzeta, entre los más cotizados.

En tan solo dos días, hasta nueve jugadores del Eibar tendrán libertad absoluta para decidir y planificar acerca de su futuro. Jonmi Magunagoitia, Jair Amador, Anaitz Arbilla, Sergio Álvarez, Ander Madariaga, Toni Villa, Jon Guruzeta y Xeber Alkain finalizarán sus respectivos contratos al término de esta misma temporada, por lo que serán libres para fichar por otro club. Cerca del 50% de una plantilla cada vez más arraigada a la entidad. Sin embargo, la mayoría de sus vinculaciones carecen de longevidad y la dirección deportiva tendrá que ponerse manos a la obra en lo que a renovaciones se refiere.
A pesar de que cada caso sea único, lo cierto es que hay varias firmas marcadas en rojo por la secretaria técnica. Véase las situaciones de Jonmi, Mada o Guruzeta; jugadores jóvenes, con un impacto fijo en la actualidad y de gran proyección en el futuro. Su conservación no será nada sencilla, ya que los tres han despertado el interés de otros clubes de la categoría, pero en Ipurua confían en poder retener ese talento por el que tanto apostaron años atrás.
Asimismo, la dirección deportiva azulgrana también valora la continuidad de otros perfiles más veteranos que siguen mostrando nivel día sí y día también sobre el terreno de juego. Futbolistas como Arbilla, Sergio o Corpas podrían mantener un papel protagonista en el equipo, siempre y cuando se ajusten a las nuevas necesidades económicas del club, tal y como han hecho hasta el momento. Los tres vienen de renovar en los últimos dos años y, desde entonces, su desempeño se ha conservado a unas cotas muy elevadas. Aunque en estos casos, los diferentes deseos, como el de una retirada, en el caso del capitán, o una vuelta a casa, tanto en el avilesino como en el jiennense, apuntan a ser determinantes.
Más incierto se augura el futuro de Alkain que, por mucho que haya contado con la confianza de Etxeberria y San José, no ha terminado de cuajar en Ipurua. En caso de reparar sus cifras (un gol y dos asistencias en 46 partidos), no queda ni rastro del jugador que despuntó en su primer año en Segunda con el Sanse. Situación parecida a la de Toni Villa y Jair, con prácticamente un protagonismo residual cada uno. El acuerdo con el portugués, por su parte, posee una opción de verse ampliado un año más una vez el club así lo autorice.
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Muchas incógnitas todavía por resolver. El tiempo ya ha empezado y los teléfonos de dichos jugadores comenzarán a echar humo en breves. Entre los teléfonos involucrados estará el de César Palacios que, además de decidir su futuro (a su vez termina vinculación en junio), también deberá tomar una decisión sobre todos ellos.
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