COPA DEL REY | DIOCESANO 1 - REAL ZARAGOZA 0
“Quiero que los jugadores tengan esa sensación de vergüenza”
Fran Escribá se ha mostrado bastante decepcionado tras caer eliminado de la Copa del Rey frente al Diocesano: “Nuestra obligación era ganar este partido”.
Fran Escribá, que esta mañana ha debutado como entrenador del Real Zaragoza, se ha mostrado bastante decepcionado tras caer eliminado de la Copa del Rey frente al Diocesano: “Nuestra obligación era ganar este partido, por lo que la valoración no puede ser más que negativa. Quiero que los jugadores tengan esa sensación de vergüenza, de saber que hemos hecho mal las cosas. Estamos obligados a mucho más”.
Valoración: “Es negativa. Todos sabemos que la Copa del Rey tiene una fecha de caducidad para casi todos los equipos. Puedes pasar una o varias rondas, pero antes o después lo lógico es caer eliminados, aunque evidentemente nuestra obligación era ganar este partido, por lo que la valoración no puede ser más que negativa. Hemos cometido errores, incluida la jugada que origina el penalti. Dijimos que crecieran desde lo que ellos pudieran hacer, pero no desde nuestros errores. Es verdad que apenas nos generaron cosas, aunque nosotros tampoco generamos mucho. Lógicamente, algo más, es nuestra obligación. Tenemos que ver aquellas cosas que estamos haciendo mal para que esto acabe”.
Falta de gol: “Se ha visto que los dos equipos podemos tener problemas con el gol porque el suyo es de penalti. No recuerdo paradas de nuestro portero y se ha generado muy poco fútbol en las áreas. Sabemos los problemas que nos han traído a esta situación. El gol es un ejercicio colectivo y tenemos que ser capaces de generar mucho más. No nos queda otra que trabajar. Si algo nos debe servir en una derrota tan dura como ésta tiene que ser darnos cuenta de que si nosotros no vamos al 120% en todos los sentidos, la Liga, que es lo que verdaderamente importa, será complicada, como se está viendo. Tenemos que mejorar muchísimas cosas para que el equipo tenga un rendimiento más acorde con la categoría”.
Actitud: “El equipo tuvo la actitud que debe tener. Al final las lecturas se hacen sobre el resultado y entiendo que es y debe ser negativa, pero creo que el esfuerzo es bueno. Otra cosa es que no estemos acertados, que no hayamos jugado bien o que no hayamos generado fútbol”.
Decepción: “Entiendo que nuestra afición esté decepcionada, igual que nosotros. Deseábamos una victoria y por eso digo que si hay algo que se puede sacar positivo es darnos cuenta de que tenemos que dar mucho más. Y no me refiero al esfuerzo, ya que sigo pensando que los jugadores están muy implicados con el proyecto. Quieren, otra cosa es que no estemos haciendo bien las cosas”.
Expulsión de Ratón: “Me han aclarado que es segunda amarilla, por lo que no va a afectar a la Liga. De todas maneras, aunque no afecte, está fuera de lugar lo que hagamos en ese sentido. Me cabrea que dos amarillas hayan sido por protestar. Ése no es nuestro partido. Sólo faltaría que focalizáramos algo sobre el árbitro. Tenemos que mirarnos a nosotros mismos, no a los demás”.
4-4-2: “No por tener más delanteros vas a tener más gol, pero sí que creo que debemos tener algo más de presencia en el área. Tenemos muchos mediapuntas y viene mucha gente a recibir. Es algo a corregir. Recibir en zonas frías lo hace cualquiera. Hay que recibir en zonas de tres cuartos, donde podamos romper líneas y hacer daño. Bermejo empezó bien en ese sentido en la segunda parte. Recibió muy bien, encaró y condujo. Es lo que pedimos, pero no a los delanteros, sino a los interiores o a los jugadores que jueguen de enganche. Lo que queremos es presencia en el área. Es evidente que no hay un gran goleador en el equipo, pero esa aportación de la segunda línea y de la gente de arriba tiene que ser mayor. A los delanteros, en aquellas situaciones profundas, los quiero en el área, no quiero a cuatro pidiendo el balón fuera del área porque eso es una mentira en el fútbol actual”.
Estado anímico del vestuario: “Ahora están como tienen que estar. No aceptaré otra cosa. Están como estamos todos: muy dolidos y avergonzados. Y no me importa. Debemos estar así. Lo único que me apetece es volver a casa y ponerme a trabajar. No me apetece ver a nadie y quiero que los jugadores tengan esa sensación de vergüenza, de saber que hemos hecho mal las cosas. Partiendo del esfuerzo que sí que tienen, debemos darnos cuenta de que estamos obligados a mucho más. Hay que recuperar a la gente por el camino, necesitamos la mejor versión de todos”.