Quique: “Al acabar el partido nos tiene que doler el cuerpo”

¿Tiene bajas o están todos disponibles?

Vamos a esperar hasta el último día. De momento Amavi no llega y mañana veremos más cosas.

Otro rival directo y el Cádiz lleva tres victorias seguidas en casa.

Sabemos que todo son finales desde hace mucho tiempo. Enfrente habrá un rival al que hemos seguido mucho. Tiene las cosas clarísimas. A y como mucho B y con eso funcionan de forma espectacular. Son humildes, muerden, aprietan y será un escenario complicadísimo. Ya lo han sufrido otros equipos y conocemos al Cádiz de otras temporadas.

En casa ya ganan. ¿Qué les falta para ganar también fuera?

Es importante dejar la portería a cero y que nos parezcamos a la hora de morder a lo que somos en los partidos de casa. No ha habido gran diferencia en esta temporada. Cuando hemos estado bien en casa lo hemos estado fuera y al revés. Es cuestión de momentos y estados de forma. No hay diferencia a la hora de preparar los partidos o en los planteamientos.

¿Cómo has cambiado el ánimo de los jugadores en los últimos partidos?

No hay fórmulas mágicas. Cuando las cosas aprietan nos cala hasta los huesos y no es una alarma que ponga el entrenador, la afición o la prensa. Es una alarma real, oportuna y carnal. Ante eso hay que reaccionar con los instintos más profundos que tenga cada uno. Hicimos borrón y cuenta de nueva de la primera vuelta que no nos gustó y obtuvimos pocos puntos. Nos propusimos cambiar eso y vamos haciéndolo, pero no nos acomodemos y vayamos a cada partido que es importantísimo.

El Cádiz no pierde en casa desde septiembre. ¿Puede ser el día de romper esa racha?

Lo que es el Cádiz, su estadio y su gente lo conocemos. Es una afición muy caliente y meten presión sobre el rival y sobre las situaciones del partido. Meten treinta mil personas y aprietan como leones. Sus jugadores están comprometidísimos. Esa es la dificultad que tiene el Cádiz y lo sabemos. Nos jugamos muchísimo los dos equipos. Esto es el futbol. No veo ningún partido fácil ni a un rival asequible salvo que trabajes muy bien el partido y te salgan muy bien las cosas.

¿Cómo valora el récord que ha alcanzado Simeone al frente del Atlético de Madrid?

Tiene muchísimo mérito y le felicito. Consigue algo magnífico. Tengo muy buena relación con él. Nos encontramos a veces e intercambiamos opiniones de fútbol que nos encanta a los dos. Tenemos una mentalidad muy parecida. Es un tipo con el que es muy fácil entenderse y comulgo con casi todo lo que hace.

Hay finales y finales. ¿En qué se diferencia de las anteriores?

No me parece una final diferente a los partidos con el Girona o el Valencia que están en situación similar a la nuestra. Lo que diferencia es que todo lo que puede añadir presión al partido está a favor de ellos. Es su estadio, sus aficionados, son ellos los que van a apretar al árbitro y te van a llevar al límite como lo han hecho con otros equipos que llegaron enteros y se fueron dolidos de allí. Para que nos vaya bien, cuando acabe el partido nos tiene que doler el cuerpo. Tener que subir al autobús con sensación de que nos duele el cuerpo y nos vamos magullados. Es un partido de duelos, de segunda jugada y de velocidad de balón en los metros finales. Un partido rápido y vivo. Si nos duele el cuerpo al subir al autobús estamos más cerca del resultado.

Hace un par de semanas dijo que alguien siempre acierta las alineaciones. ¿Han conseguido acabar con esas filtraciones? ¿En caso contrario que perjuicio supone para el Getafe?

Respetamos muchísimo la opinión de la prensa, pero estamos muy en contra de la gente que pueda estar trabajando desde dentro de nuestro propio club y jugando con nuestros intereses en favor de los medios de comunicación. Hemos hecho cosas para que ya no ocurra. La semana pasada conseguimos que no salga la alineación y el plan de partido que tenía enfadados a los futbolistas que eso pudiera ocurrir. Seguimos haciendo nuestras cosas internamente para ir cerrando el círculo. Dar o no con la persona da igual, pero que los planes de la semana no lleguen, porque de los demás equipos a nosotros nunca nos llega nada.

¿Hacen muchos números de los puntos que harán falta para salvarse?

Como entrenemos pensando en las matemáticas se nos va lo más importante. Somos gente de campo, no de matemáticas. Tenemos los mismos puntos que el año pasado, pero el equipo es distinto y ya no cuenta todo eso. La velocidad del vagón de la liga de este año va más rápido y si te paras te puede atropellar. Hay que subirse a la velocidad que va el tren.

¿Qué le parece que haya tantos equipos metidos en la pelea por la permanencia?

Siempre es mejor que haya más. El año pasado fue calcado a este. Siempre dije que era y es una cosa de diez equipos hasta casi el final. Miro hacia arriba y de 22 puntos a 31 hay dos partidos sobre quince. En fútbol hemos visto de todo. Lo que no podemos es jugar diez partidos cada semana. Sólo podemos jugar el nuestro, intentamos hacerlo lo mejor posible y ganar. Luego ya, si hay que mirar al resto, se mira.

Hay dos grandes (Sevilla y Valencia) en esa pelea a la que no están acostumbrados. ¿Es una ventaja para ustedes?

No quiero pensar que es una ventaja. Nuestra mentalidad, mientras luchamos en esto, es pensar que hacemos las cosas para no llegar a esta situación. Hacemos revisión constante y tenemos nuestra opinión. Lo ideal sería que el Getafe no estuviese en esta situación, pero ya lleva unos cuantos años así y hay que planteárselo, porque los sufrimientos se pueden evitar antes.

¿Cuál el sistema de los que ha empleado que más le ha gustado?

Es difícil hablar de sistemas. Yo hablaría de ajustes. Es verdad que hemos tenido cierta parálisis en cuanto a sistemas y movimiento en la primera parte del campeonato. Los equipos no son sólo los equipos. Son los equipos y sus circunstancias. Internamente las conocemos. Ahora hay jugadores que empiezan a encontrarse y eso nos permite poder pensar cosas.

¿Cuál puede ser la clave del cambio y la mejoría?

Me centraría en la unidad. Esto es un tren que circula y nosotros somos los pasajeros. Es mejor que vayamos charlando e inculcándonos ánimos sabiendo que tenemos objetivos comunes. Eso es mejor que ir leyendo un periódico distinto cada uno en asientos diferentes. La unidad del equipo actual me gusta y a partir de ahí es más fácil.