Las novedades arbitrales de LaLiga 2023-2024: manos, penaltitos, rojas...

Nueva temporada, nuevos retos. Medina Cantalejo, presidente del CTA, admitió que la temporada pasada fue mejorable: “Cuando el número de intervenciones del VAR aumenta no es una buena noticia. Los árbitros tienen que mejorar”. Por ello, ha puesto deberes a sus árbitros en este mes de agosto. Repasó y unificó criterios de cara al inicio liguero, especialmente en conceptos como tarjetas rojas, penaltitos, VAR y tiempo efectivo.

Más protagonismo en el campo que en el VAR

Hay descontento en el CTA por la falta de decisiones de los árbitros de campo. Quieren que el juez que está en el césped debe tener un papel más protagonista y consideran que en la pasada temporada dejaron de pitar varias acciones y de ahí que el VAR batiera récord de correcciones. Aunque Medina Cantalejo lo considera un “mal endémico” que afecta a toda Europa, quiere atajar ese problema. Ha pedido a los que están en el campo que sean ellos los que vean las jugadas. Esto no quiere decir que el VAR se abstenga de entrar, sino que pide mayor y mejor concentración, atención y resolución a los trencillas principales.

Tarjetas rojas

El año pasado muchos clubes se quejaron del gran número de expulsiones. Rara fue la jornada en la que no se vio una roja, pero los árbitros lo achacan a la intensidad del juego, que fue especialmente elevada la pasada temporada. El número de rojas por las entradas de juego brusco grave aumentaron un 21%. Y avisan que se dejaron varias por el camino sin mostrar. Por eso, no lo consideran un error y no se variará la forma de señalizarlas durante la nueva temporada. Aunque sí se prestará mucha más atención a cómo se produce la acción. No se quieren quedar solo con la fotografía de la entrada, que suele ser muy fea, sino que se les ha pedido que tengan una especial atención a cómo se produce. Si el futbolista juega previamente el balón y la entrada se produce en la misma sin ninguna intención o si realiza algún movimiento que la provoque.

Penaltitos

Se mantiene el objetivo de la temporada pasada: no pitar los contactos de baja intensidad dentro del área. Aunque alguno sí se pitó, el número de penaltis (sin incluir manos) bajaron un 21%. Lo que consideran un éxito y quieren seguir manteniendo la inercia. Además, desde el CTA insisten en desterrar el mito de que si el árbitro pita un penaltito y hay un mínimo contacto, el VAR no puede intervenir. “Es una falsa creencia. Si hay evidencia de que el contacto no es proporcional como para pitar penalti, el VAR debe entrar”, ha explicado Clos Gómez.

Tiempo añadido

Una de las actuales cruzadas del mundo del fútbol es intentar que el juego efectivo aumente. Una lucha contra las pérdidas de tiempo que ya se vio la pasada campaña con descuentos más abultados. En esta nueva temporada, los añadidos seguirán aumentando. Una de las razones está en el nuevo criterio para decidir estos tiempos extras. Por cada gol que se marque en un partido, habrá un minuto más de añadido, ya que han estudiado que es la media de tiempo que se gasta en una celebración en la que no interviene el VAR.