Las lesiones castigan al Villarreal en su demarcaciones más endebles

El Villarreal está viviendo una racha de lesiones y problemas físicos en su plantilla en las últimas semanas, unos problemas que curiosamente están incidiendo sobre todo en las demarcaciones en las que el club se encuentra ahora más débil. Las lesiones se centran en la portería, en la zona de volantes y en la línea de ataque, siendo las tres posiciones en las que el club ha dejado salir futbolistas en este mercado de invierno.

Con ello, se vienen arrastrando problemas y molestias en una portería en la que ya no está Gero Rulli, ya que los problemas de Pepe Reina, y ahora la lesión de Filip Jorgensen, dificulta el trabajo del técnico. Así, Jorgensen tuvo que aparecer para suplir las molestias de Pepe Reina; mientras que ahora con la lesión en el hombro de Jorgensen, es el otro portero del B Iker Álvarez, el que ha subido el primer equipo.

En el centro del campo, la salida de Morlanes sumada a la lesión de Gio Lo Celso en fase de recuperación, dejaban la línea de mediocampistas algo tocada. Para desgracia de los castellonenses, la lesión de rodilla de Francis Coquelin castiga todavía más esta posición y la deja más mermada.

Mientras que en la posición de ataque, la salida del club de Arnaut Danjuma cedido al Tottenham inglés, se suma la lesión del delantero Nico Jackson, y las molestias de Gerard Moreno, con lo que ahora mismo el equipo está también bajo mínimos en ataque. La única lesión que no ha afectado directamente el potencial de la plantilla, al contar con tres futbolistas en esa posición, es la de lateral izquierdo Alfonso Pedraza. Por potencial su ausencia sí es un problema, pero el contar con dos laterales izquierdos más como Alberto Moreno y Johan Mojica, solventan mejor la situación.