Adán sufre en silencio

Lo que otras veces, muchas, han sido exhibiciones y paradas milagrosas de Antonio Adán como portero del Sporting de Portugal se convirtieron en una auténtica pesadilla en Marsella. Dos errores cuando el equipo ganaba 0-1 costaron dos goles, voltearon el marcador y le sumaron en un mar de dudas. Lo peor llegó poco después, cuando tocó el balón con la mano fuera del área y fue expulsado. Después del córner posterior, ya sin Adán en el campo, el cuadro lisboeta encajó el tercer tanto.

La prensa portuguesa fue dura con el portero español por su discreta actuación, la peor desde que es portero de Champions. “Adán mata al León”, tituló Récord. “Un culpable y varios señalados”, indicó A Bola en su análisis de la debacle individualizado en el papel de cada uno de los futbolistas.

“Son días que pasan, en los que nada sale tan bien como querías. Es parte del fútbol y hay que aceptar los errores como parte del fútbol, asumir la responsabilidad que tenemos cada uno en el terreno de juego. Se acabó. Hay que levantarse y otra vez entrenar porque el sábado hay otro partido. Obviamente el partido empezó bien con el gol de Trincao, pero el fútbol muchas veces es así. No hay más explicaciones”, dijo Adán al respecto.

El técnico del equipo, Ruben Amorim, también se refirió a su noche negra: “Cuanto más experimentado es un jugador, mayor es su autocrítica. No hubiera sido posible la carrera de Adán sin autocrítica. Sabe analizar sus actuaciones, no necesito decirle nada. Nos ha salvado muchas veces. Todos hemos pasado noches difíciles, eso es parte del fútbol”.