Patrick Vieira resucita a un clásico de Italia
El entrenador franco-senegalés ha sacado del pozo a un Genoa que comenzó la temporada con muy mal pie. Han pasado de ser últimos, a estar en mitad de tabla.
La historia de esta temporada del club de la capital de Liguria es sorprendente. El Genoa afrontaba su segunda campaña en primera después de un año oscuro en la Serie B. Al mando del equipo estaba el artífice del ascenso, el mítico delantero italiano, Alberto Gilardino. A pesar de una buena vuelta a la máxima categoría el año pasado, el inicio de este curso fue convulso en Génova.
En la jornada 10, el Genoa era el farolillo rojo, con solo seis puntos de dieciocho posibles. Lo curioso es que en la siguiente fecha, el conjunto rossoblù venció 0-1 en el campo del Parma y en la siguiente empató a uno con el Como, dos rivales directos en la lucha por la permanencia. Los resultados parecían mejorar, pero entonces Gilardino fue destituido. La directiva apostó por un exfutbolista de gran nivel, como lo fue Patrick Vieira, pero sin experiencia en banquillos italianos.
El campeón del mundo en 1998 comenzó su andadura como entrenador en Estados Undios. Estuvo tres años en el New York City y después volvió a Europa para dirigir a Niza, Crystal Palace y Strasbourg. El 20 de noviembre de 2024, Vieira llegó a un Genoa que marcaba la permanencia con diez puntos, solo uno por encima del Lecce. En aquel momento, era el segundo equipo que menos goles hacía y el tercero que más recibía en toda la Serie A. Con su nuevo entrenador, la situación ha cambiado por completo. 13 partidos después, el Genoa solo ha perdido tres partidos. Y encima, con tres rivales fuera de su liga: Fiorentina, Roma y Napoli. Ha ganado cinco y ha empatado otros cinco, alguno de ellos muy meritorios como el 0-0 contra el Milan en San Siro.
Revolución en el Luigi Ferraris
Vieira ha conseguido crear una escuadra compacta que recibe mucho menos goles que antes -de hecho nunca ha sido goleada con él- y marca más. El de Dakar modificó el sistema de tres centrales de Gilardino y pasó a jugar con cuatro defensas, renunciando a los dos puntas con los que jugaba el italiano y dejando como referencia únicamente a Pinamonti. El canterano del Inter es uno de los nombres propios de este Genoa. Con ocho tantos, es el máximo goleador del club norteño. El resto de la columna vertebral de Il Griffone la completan el centrocampista Frendup, el central Vasquez y Leali, uno de los porteros más en forma de la categoría.
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Los de Liguria se han disparado con Vieira y han pasado de mirar con la misma distancia al descenso y a Europa. Desde que el franco-senegalés se sentó en el banquillo del Luigi Ferraris, el Genoa ha sumado solo dos puntos menos que la Juventus, que actualmente va cuarta. Ahora mismo son 10 puntos sobre el Parma, que marca el descenso, y a 12 de la Fiorentina, sexta clasificada. Obviamente, en Génova quieren asegurar cuanto antes la permanencia y luego soñar con cosas mayores.
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