Otro mercado esquivo con el Athletic
Ruiz de Galarreta y Martón, únicos fichajes en un verano en el que se escapó Herrando y que se intenta apurar con Guillamón.
Toda la vorágine que se despliega en los días finales de mercado suele pasar de puntillas por Bilbao. El Athletic apenas registra entradas en cada ventana estival. y este año no es una excepción. Han llegado Ruiz de Galarreta, que estaba apalabrado desde hace tiempo al quedar libre en Mallorca. Y también aterriza Martón, igualmente a coste cero. Era una operación muy oportuna, tipo Petxarroman en el lateral diestro. No implica ningún esfuerzo económico y si sale bien, teniendo en cuenta la falta de gol que se arrastró el año pasado, pues sería un negocio redondo.
La puerta de salida suele estar más abierta en estos casos. Este año se ha cedido a Vencedor, al Eibar, y Morcillo, al Amorebieta. El club zornotzarra quería a Martón e Izeta, pero al final se queda sin ellos, ha elegido a Da Graca, cedido por la Juventus, y Avilés, del Leganés. Ibaigane se marcó la prioridad de firmar a un central tras la salida de Iñigo Martínez al Barcelona, y fijó sus dardos en Herrando, aunque finalmente renovó con Osasuna. Con Laporte no hubo ningún movimiento porque es imposible acceder a sus pretensiones. Arabia zanjó un tema que ni se inició.
Y ahora apura las últimas horas de mercado con Guillamón. El central-pivote no juega con Baraja, pero no está por la labor de salir de Valencia, que pide el abono de la ficha para la cesión a San Mamés. La operación está estancada por el momento y no verá la luz, a no ser que las tres partes cedan un poco. Su alta ficha, cercana a los dos millones, es un freno en una negociación en la que el Athletic ya ha advertido que no puede llegar ni de lejos a las cifras que se manejan en la capital del Turia.