Osasuna-Athletic, entre la ilusión de uno y la ambición de otro

La semifinal de Copa que protagonizarán Osasuna y Athletic se puede resumir en dos palabras: ambición por parte rojilla para llegar a la segunda final de su historia e ilusión rojiblanca por llegar a esa pelea definitiva de mayo en La Cartuja y levantar el trofeo al fin después de cinco intentonas desde 2009. Los leones han dejado atrás a Alzira, Eldense, Espanyol y Valencia, mientras que el plantel navarro se ha deshecho en anteriores rondas del Fuentes, Arnedo, Gimnàstic de Tarragona y Betis, vigente campeón. Está invitado a la mesa con los tres equipos más laureados.

Ésta es la cuarta vez que Osasuna y Athletic se enfrentan en la Copa del Rey, todas ganadas por el conjunto bilbaíno en las ediciones de 1955-1956 y 2008-2009, en octavos de final, y en la 1960-1961 en cuartos. “Ilusión tenemos más que los otros tres semifinalistas juntos”. Ese es el espíritu que adorna a los navarros, lanzado por el director deportivo, Braulio. Su homólogo en Lezama, Mikel González, considera que Osasuna será un “rival duro”, pero igualmente admitió que en la entidad tienen “mucha ilusión” puesta en esta competición porque entre la afición “hay una generación con hambre” de levantar este título.

“Damos mucho valor a lo que estamos consiguiendo en los últimos años pero queremos más. No nos conformamos con las semifinales. Ahora ojalá tengamos ese punto de suerte que nos está faltando y podamos llegar a la final”, dijo Mikel González, al valorar el sorteo de semifinales celebrado en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. “Es una competición que gusta mucho en Bilbao y hay una generación que estamos con hambre de Copa. Hemos estado cerca los últimos diez años y a todos nos motiva especialmente cualquier partido de esta competición. Además en esta eliminatoria jugaremos la vuelta con 52.000 personas empujando y estamos convencidos que podemos pasar a la final”, comentó.

Sobre Osasuna, el dirigente del Athletic reconoció que la eliminatoria tiene un componente añadido de rivalidad por la “cercanía” entre Bilbao y Pamplona. “Preveo una eliminatoria igualada, que se decidirá por pequeños detalles, y el que más acierto tenga pasará a la final. El sorteo ha querido que juguemos la vuelta en San Mamés, así que ojalá tengamos buen resultado en la ida”, finalizó.

Ernesto Valverde no esconde que les ha tocado el enemigo que deseaban. “Cualquier rival que nos tocara iba a ser duro, pero está claro que el Madrid y el Barça eran en principio los que ni Osasuna ni nosotros queríamos. Tengo la sensación de que todos nos querían a nosotros y todos querían a Osasuna en cierta medida, me refiero al Barça y al Madrid”, reflexionó tras la sesión matinal de Lezama.

El entrenador rojiblanco considera que se trata de un sorteo que en cualquier caso “es difícil porque ya todos los rivales nos estamos jugando mucho. Osasuna ahora mismo está en un gran momento, haciendo una gran campaña y está por encima de nosotros en la tabla. Tenemos, eso sí, el segundo partido en San Mamés, que habrá un gran ambiente. También suponemos que habrá un gran ambiente en El Sadar”. Entiende que esta semifinal “hay que jugarla. Muy competida. Es además un derbi, con también ese punto emotivo que llevan los derbis y mucho más con lo que nos estamos jugando . Estamos igualados en ese sentido”

Valverde considera que el que juega el segundo partido en casa tiene la ventaja de que “si llegas a prórroga, juegas 30 minutos más con tu público”. Es consciente de que “para pasar a una final hay que hacer dos grandes partidos, eso sí que lo tengo claro, tanto en casa como fuera. No vale fiarlo todo a que hagas un buen partido un día porque si tienes una debacle en el otro no vas a pasar”. Lo que considera evidente es que daben hacer dos partidos “fuertes” porque “Osasuna nos va a obligar”. “Ya lo hemos visto hace poco en San Mamés cuando dominamos el partido y no pudimos ganarles (0-0). Es una eliminatoria bonita con el premio que hay detrás. Hay que disputarla”, recalcó.

Por su parte, una leyenda en Bilbao como Andoni Goikoetxea, representante institucional del Athletic, coincidió en que tienen “mucha ilusión” por llegar a la final, aunque profesa “mucho respeto” hacia el rival, “la auténtica revelación de la Liga”. Osasuna es un rival difícil, complicado, como se vio hace poco cuando jugó en San Mamés, y empatamos a cero. Hay que tenerle respeto porque tiene un buen equipo y jugará sus bazas”, confesó el dirigente bilbaíno, satisfecho por jugar la vuelta en San Mamés. “Siempre he preferido jugar en casa la vuelta de una eliminatoria, aunque eso tampoco es una cosa exacta para pasar de ronda”, concluyó.

Braulio Vázquez añadió que “soñando no se pueden poner límites”. “Todos nos querían a nosotros pero a ilusión no nos gana nadie. Hay que disfrutar el camino hasta donde nos lleve. Obviamente por historia no estamos a ese nivel pero en ilusión tenemos más que los tres juntos”, explicó el director deportivo rojillo. “Me gustaría haber jugado en San Mamés primero, el factor campo allí también es importante”, concluyó.

Jagoba Arrasate, se mostró optimista ante el “durísimo” cruce, en el que los rojillos harán valer sus ganas por “jugar la final” en La Cartuja. “Creo que es una eliminatoria preciosa. Un derbi, en unas semifinales de Copa. Tenemos muchísima ilusión y sabemos que ellos están muy habituadosa este tipo de partidos”, afirmó el preparador del cuadro pamplonés. Arrasate se mostró animado y apuntó que su equipo peleará “a muerte” por estar el día 6 de mayo en La Cartuja. “Espero el mismo ambiente. Sabemos que vamos a jugar en casa con un Sadar abarrotado y tenemos que hacer valer ese gran ambiente”, comentó respecto al primer partido, que se jugará en Pamplona.

El técnico de Osasuna restó importancia al hecho de cerrar las semifinales en Bilbao: “Hoy en día, jugar primero en casa puede ser determinante, o no. El Athletic pasó en Valencia y nosotros contra el Betis también”. “El Athletic es un club copero. Tiene muchos títulos, todos los años está ahí y este no será una excepción. En Liga jugamos en San Mamés y sufrimos mucho, pero entiendo que tenemos nuestras opciones y que vamos a apurarlas al máximo con nuestra gente”, destacó. El equipo vizcaíno tiene tomada la medida a Osasuna en los últimos tiempos. Dos empates y dos victorias del Athletic es el balance de los cuatro últimos enfrentamientos, con siete tantos rojiblancos y tres rojillos. Como dato positivo para los intereses del equipo navarro, los de Arrasate vencieron en dos choques de manera consecutiva antes de ello. En la campaña 2019-20, un gol de Oier en San Mamés desequilibró una igualada cita. Ocho meses más tarde, en la temporada del Centenario del club navarro, Osasuna tumbó a los ‘leones’ por 1-0 gracias a un penalti transformado por Rubén García.

Kike García valoró positivamente el emparejamiento. “Estamos muy ilusionados por llegar a estas semifinales y contentos por toda la competición que llevamos. Está siendo muy bonito y estamos con ganas de afrontar esta eliminatoria”, dijo el delantero manchego, autor de cinco tantos este curso en la competición copera. “Vamos a tratar de aportar y competir. Somos un rival duro de batir y vamos con esa ilusión. Estamos con muchas ganas, expectantes, y esperando ya que llegue ese día para jugar contra el Athletic”, concluyó.