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REAL SOCIEDAD

Ni los triunfos dan tregua a la enfermería txuri-urdin

Imanol Alguacil terminó el partido de Son Moix preocupado por el estado físico de algunos jugadores contra el Mallorca: “Mejor me callo”, dijo intrigante.

PALMA DE MALLORCA (ESPAÑA), 18/02/2024.- El centrocampista del Mallorca Antonio Sánchez (d) disputa un balón este domingo durante el partido de la jornada 25 de LaLiga EA Sports, entre el Real Mallorca y la Real Sociedad, en el estadio de Son Moix de Palma de Mallorca (Islas Baleares). EFE/ Cati Cladera
CATI CLADERAEFE

Esta temporada en la Real Sociedad las alegrías nunca son completas. Siempre hay algo que emborrona un buen momento y que hace que la felicidad sea incompleta. El último ejemplo lo encontramos en Mallorca. Llevaban los txuri-urdin sin saborear una victoria en Liga desde mediados de enero, y sin marcar los últimos cinco partidos. Ambas estadísticas negativas se borraron de un plumazo en Son Moix. Victoria ‘in extremis’ (Merino marcó el gol del triunfo en el 92′) y a falta de una, dos dianas. Felicidad absoluta en el bando donostiarra… pero no completa. Porque ni en los días más alegres la enfermería, que le está machacando en este momento de la temporada, le da tregua a la Real Sociedad.

Y es que fueron varios los jugadores que terminaron ‘tocados’ el partido contra el Mallorca. Igor Zubeldia se llevó un fuerte golpe en la nariz y se teme que pueda tener alguna fisura de los huesos propios. La entrada que sufrió Traoré de Samu Costa en la recta final le puede haber provocado una pequeña lesión en el tobillo. El autor del gol de la victoria, Mikel Merino, jugó con el hombro dolorido, y el esfuerzo seguro que no le ayuda a mejorar. Hay que recordar que se le salió en el partido de Champions en el Parque de los Príncipes de París. Le Normand juega con pequeñas molestias que de momento no le impiden jugarlo casi todo, pero ya se ha tenido que gestionar sus cargas para evitar una lesión, cuando el año pasado lo jugó prácticamente todo. Y Umar Sadiq sigue jugando renqueante de su rodilla, pero no le impide ayudar, que es lo que pretende con muy poca fortuna, lamentablemente. Ante esta tesitura, Imanol Alguacil prefirió callar tras el choque en Mallorca y mantener viva la esperanza de que la enfermería no aumentará esta semana. A día de hoy tiene 6 jugadores de la primera plantilla lesionados. “Mejor me callo”, señaló de forma intrigante.

La retahíla de jugadores lesionados es tremenda. No es que ya no esperen recuperar a alguno de cara al viernes contra el Villarreal, sino que desea que no caigan alguno más a la enfermería. “Vamos a ver, porque el partido ha sido duro. Además de que ya veníamos acumulando de París, hoy también va a haber algún que otro tocado. A ver a quiénes recuperamos. Lo que puedo decir es que Mikel Oyarzabal ayer no pudo salir al campo. Ya veremos cómo evoluciona. La lesión le está dando la lata más de lo que pensábamos. Aritz todavía no ha tocado balón, Tierney hizo una sesión muy suave con nosotros el día anterior, y vamos a ver si recuperamos. Ojalá que no caiga nadie de los que hoy hemos estado aquí. A Igor lo he tenido que cambiar porque recibió un golpe bastante fuerte en la nariz y estaba un poco dolorido, mareado, y por eso el cambio. También Hamari ha acabado como ha acabado. Mejor me callo, porque el parte de guerra es importante, y como hay una semana para recuperar, esperemos que los que están hoy aquí lo estén para afrontar el partido del viernes ante el Villarreal”, dijo el oriotarra cuando se le preguntó por el parte de guerra txuri-urdin.

Al menos, esta incertidumbre con la enfermería la afrontan los txuri-urdin con la tranquilidad de haberse quitado la mochila del gol de la espalda, que pesaba ya como una losa y corría el riesgo de que enquistarse, jugándole una mala pasada. “Yo ya venía repitiendo los últimos partidos que no era por falta de ocasiones, entonces ahí estás algo más tranquilo y el equipo también. No hay duda de que queremos generar ocasiones para poder hacer goles y ganar los partidos. Es lo que no estaba sucediendo. Claro que el equipo y sobre todo los jugadores de ataque, cuando ves que pasan los partidos y encimas generas, entra la ansiedad. Las rachas buenas y malas siempre tienen un principio y un final, y ha sido en Mallorca”, reflexiona Imanol.

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