Muniain abandona el Athletic
Atrás quedan casi 20 años de pertenencia al club y 15 en el primer equipo. “Me voy feliz por haber sacado la gabarra”.
Con pocos días para reponerse por el anuncio de Raúl García de que cuelga las botas, ha llegado otra despedida y esta es del todo sorprendente. Munian pone fin a su etapa en el Athletic. Así lo ha anunciado esta mañana a sus compañeros en el gimnasio de Lezama antes de arrancar la tarea del día. Algunos, como su ‘hermano’ Iñaki Williams han roto a llorar. La emoción ha invadido al rubio mediapunta, al que rebautizaron en su día como Bart Simpson por su increíble parecido con el pícaro chaval de la serie de dibujos animados. Algo antes, en el vestuario de San Mamés, completamente vacío, ha lanzado un mensaje ante los medios del club. “Llegué a Bilbao con doce años, siendo un niño y hoy, casi dos décadas después, vengo a anunciaros mi marcha al final de esta temporada”, ha lanzado en tono serio a la hinchada. El capitán, uno de los hombres más queridos por la grada, nota que cada vez tiene menos protagonismo en los partidos, aunque su carisma sigue intacto. Fue uno de los que anotaron gol en la tanda de penaltis que dio el reciente título de Copa y el absoluto animador de las fiestas posteriores. Muni no aclara si seguirá jugando al fútbol o, como Rulo, lo deja. Siempre ha valorado mucho ser un One Club Man, el sentido de pertenencia. La idea es salir al extranjero. El presidente Uriarte le ofrecía seguir, pero prioriza jugar, algo que Valverde no le puede garantizar.
FOTOGALERÍA
Muniain y el Athletic separan sus caminos con un final glorioso tras el triunfo en la final de la Copa del Rey 2024.
En diciembre cumple 32 años. “Has sido lo mejor de mi vida, pero ahora, mi amor, ha llegado el momento de separarnos”, lanza haciéndose eco de una canción en euskera que ha sido protagonista durante los festejos por la Copa. “Me voy feliz, con el sueño de haber levantado el tan deseado vigesimoquinto título de Copa y de haber sacado la gabarra 40 años después”, va detallando en el adiós.
“Ha sido increíble, la comunión que hemos mostrado entre afición y equipo demuestra que verdaderamente somos únicos en el mundo. Ha sido una decisión muy difícil, pero creo que es lo mejor tanto para el Athletic como para mí”. Va a tener dos apariciones más en San Mamés para celebrar con la gente la despedida: precisamente ante Osasuna, el club de su tierra, el fin de semana del 11-12 de mayo y ante el Sevilla el siguiente, el 18-19. El 10 promete “pelear por ese soñado puesto de Champions”. Se va como segundo jugador de la historia rojiblanca con más partidos disputados. Acumula 557, por detrás del inalcanzable Iribar (614). Dos graves lesiones de rodilla frenaron una carrera repleta de grandes momentos. Su señorío siendo capitán asistiendo a las celebraciones de los equipos que les derrotaron en las finales de 2021 en La Cartuja quedan para la historia. Este año ha jugado en 22 partidos, solo 7 como titular, y 802 minutos. Ha anotado dos goles, ante el Mallorca en Liga y el Eibar en Copa.
Despedida Muniain
Muniain, en el entrenamiento de hoy en Lezama
Iker es un exponente de jugador que ha alcanzado sus metas con enorme precocidad. Un niño prodigio. La llegada del pequeño genio de la Txantrea fue como un terremoto. Como cuando aparecieron otros grandes de la entidad rojiblanca -Fidel Uriarte, Julen Guerrero o Joseba Etxeberria, entre otros-. Se hizo león el 30 de julio de 2009 en un partido de Europa League frente al Young Boys suizo, convirtiéndose entonces, con 16 años, 7 meses y 11 días, en el futbolista más joven en debutar con la camiseta rojiblanca. Caparrós apadrinó sus primeros pasos. Aquella misma anotó al Real Valladolid el 4 de octubre, con 16 años y 289 días de edad, se convirtió entonces en el jugador más joven en anotar un gol en Primera División. Su juego dinámico, eléctrico de uno contra uno, maravillaba en Bilbao. Pues sí, por entonces Muniain exhibía una velocidad tremenda. Tanta como facilidad tenía para ir deshaciéndose con balón de los rivales que le iban llegando. Al primero y al segundo siempre les superaba y al tercero muchas veces. Era un Iker eléctrico y casi imparable al que le frenaba un tanto un golpeo de balón muy alejado de su conducción y atrevimiento. Un golpeo que fue mejorando, casi imperceptiblemente, hasta que, en el tramo final ya de su carrera en Bilbao, con Gaizka Garitano y Marcelino, se hinchó a dar asistencias a balón parado La mediapunta era su sitio, pero por razones del guion tuvo que adaptarse al carril izquierdo en muchos partidos. Se va por la puerta grande. Ahora toca coger el relevo del liderazgo en el vestuario a Iñaki Williams. Se va un tipo único, especial, el Bart Simpson de Bilbao, por su parecido con el famoso chaval travieso de dibujos animados.
Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.