Mendy, en el mercado

El Real Madrid sigue funcionando a pleno rendimiento de cara a la confección de la plantilla de la temporada 2022-23, para la cual ya están llegando nombres nuevos para reforzar al equipo del doblete Liga-Champions. Primero se confirmó el fichaje de Antonio Rüdiger, central que llega gratis desde el Chelsea para reforzar la zaga defensiva; y está a punto de caramelo la incorporación de Aruélien Tchouaméni desde el Mónaco, que cobrará 80 millones fijos (y hasta otros 20 por objetivos) a cambio del prometedor centrocampista francés, al que ven en el Madrid como potencial relevo generacional de Casemiro. El segundo caso sigue pendiente de confirmación oficial, pero cuando quede anunciado el Madrid habrá hecho ya retoques en dos de las cuatro líneas del esquema.

Pero no trabaja solo el Madrid en las llegadas; también en las salidas, apartado en el cual tres están ya consumadas por la finalización de contratos: Isco, Marcelo y Bale. A esas pueden sumarse otras de jugadores que no ven claros sus roles en el equipo blanco, como podrían ser Ceballos o Asensio. También futbolistas que no cuentan y que saben que, si se quedan, lo harán para jugar muy poco, como Jovic, Mariano o Vallejo. Y hay otro grupo, uno en el que están los futbolistas que no figuran en el escaparate, pero que sí podrían salir si llega una oferta que justifique su traspaso. En ese grupo está Ferland Mendy.

El lateral izquierdo francés ha sido pieza clave esta temporada, como ya lo fue la pasada: ha disputado más de 2.800 minutos a lo largo de 35 partidos, en los que ha anotado dos goles y repartido cinco asistencias. Sus cualidades defensivas siguen siendo su mejor aval, así como sus problemas técnicos en espacios reducidos impiden que se desarrolle más y mejor en ataque, aunque su presencia en el tramo final del campo es prácticamente constante. Pero la llegada de Rüdiger sin duda afecta a su rol en el equipo.

Ampliar

Pues el central alemán viene para ser titular en el centro de la zaga junto a Militao, lo que desplazará a Alaba al lateral izquierdo, una posición en la que se ha desarrollado durante muchos años en el Bayern de Múnich, donde ganó fama gracias a su perfil técnico y ofensivo y su capacidad física para rectificar en defensa. Cabe la opción de que jueguen los tres como centrales en un esquema de defensa de cinco, pero es poco probable, pues no es un dibujo al que Carlo Ancelotti le haya hecho demasiado caso a lo largo de su carrera como entrenador. Este curso que acaba de terminar, sin ir más lejos, dejó claro desde el principio que se entregaba al 4-3-3 y con él siguió hasta el final, logrando nada menos que los títulos de Liga y Champions.

En este contexto, en el Real Madrid saben que la importancia de Mendy en el once tipo del equipo va a caer inevitablemente, aunque se sigue contando con él, como jugador fiable con perfecta capacidad para jugar en los partidos de máxima presión y para duelos en los que Ancelotti quiera reforzar la faceta defensiva del equipo. Sin embargo, su cambio de rol sí ha propiciado que en el club se plantee que, si llega una oferta importante, su salida no es imposible. Eso sí, debe ser una propuesta económica imposible de rechazar: Mendy costó 48 millones en 2019, procedente del Lyon, y en el club consideran que ha dado varios pasos adelante de blanco. Solo una oferta similar a aquel coste podría posibilitar la operación, una cifra a la que es complicado que llegue algún equipo en este momento.

Las opciones sin Mendy

Si se llegase a dar la circunstancia de que Mendy saliese del Madrid, el Madrid tiene tres opciones: una es recurrir al mercado para firmar un lateral que dé minutos de descanso a Alaba; las otras dos son dos canteranos como Fran García y Miguel Gutiérrez. El primero milita en el Rayo, aunque el Madrid todavía es el dueño del 50% de sus derechos, por lo que traerlo de vuelta no costaría los diez millones que marca su cláusula de rescisión, sino cinco, la mitad. Su evolución en Vallecas ha sido estupenda y no se descarta que sea repescado para luego traspasarlo por una cantidad mayor; todos los escenarios son posibles en su caso.

En el caso de Miguel Gutiérrez, es una de las perlas de la cantera madridista, uno de los jugadores en los que más fe tienen en el Real Madrid. Pero Carlo Ancelotti no parece ser de la misma opinión, pues empezó contando mucho con él para luego dejar de llamarlo, incluso cuando las bajas por lesión desembocaban en el lateral del Castilla como mejor opción. Si no se queda en el Madrid, saldrá cedido o traspasado: su etapa en el Castilla está concluida tras dos temporadas en las que las lesiones no le han dejado brillar al nivel que él hubiese querido, pero en las que ha mostrado sus cualidades por momentos.