Mbappé, todo o nada

El PSG afronta un mes de mayo repleto de dudas y con un episodio convulso de por medio. Este martes, el conjunto parisino anunció, no de forma oficial, una sanción de suspensión de empleo y sueldo a Messi, después de que realizara, el lunes, un viaje a Arabia Saudí sin el correspondiente permiso del club. El argentino no jugará contra el Troyes el domingo, tampoco ante el Ajaccio el 13 de mayo y en Francia se preguntan si volverá a competir con la camiseta del equipo capitalino.

La entidad presidida por Nasser Al Khelaïfi ha decidido dar un cambio radical a su política de gestión. Si en agosto de 2021, el proyecto de galácticos de Qatar culminaba con las incorporaciones de Messi y Ramos, la realidad actual es que los dirigentes del PSG buscan ahora futbolistas jóvenes, franceses, que aumenten el espíritu colectivo de la plantilla y que no sea un conglomerado de estrellas que rompen el equilibrio que necesita cualquier equipo de fútbol.

Por supuesto, el eje del proyecto tiene nombre y apellidos, Kylian Mbappé. Sin Messi, sancionado, y sin Neymar, lesionado, toda la responsabilidad del ataque del PSG hasta final de temporada recaerá sobre sus espaldas. Aunque, a priori, el título de la Ligue 1 no peligra, los pupilos de Galtier disponen de una renta de cinco puntos respecto al segundo clasificado, el Marsella, que podría meterle presión si consigue ganar el sábado en su visita al campo del Lens, 24 horas antes del partido del PSG en Troyes.

Troyes y Ajaccio son los dos próximos compromisos del líder de la Ligue 1, partidos que deberían ser sencillos en vistas de que sus dos rivales están prácticamente descendidos. Mbappé deberá liderar a una plantilla que ya ha sufrido nueve derrotas en lo que va de año, cinco más que en todo el 2022 y que, además, se encuentra en un período de crisis e inestabilidad después de los últimos episodios, casi todos extradeportivos, que han agravado los problemas internos en París.

Sin Messi, Mbappé pierde a su mejor socio en el campo. Incluso en los peores días del PSG, ambos habían sacado adelante partidos complicados debido a la calidad intrínseca que atesoran ambos. El argentino nutría continuamente al francés de oportunidades de gol y viceversa y Galtier respiró en abril, consiguiendo dos victorias ante el Niza y el Lens que le podrían haber costado su puesto como entrenador.

Un proyecto en torno a Mbappé

El mensaje del PSG es claro: el objetivo es hacer un equipo en torno a Mbappé. Con la prácticamente confirmada salida de Messi, Luis Campos dispondrá de mayor margen de maniobra para acometer incorporaciones, ya que liberará un importante salario, 40 millones de euros brutos concretamente, y se centrará en fichar a futbolistas jóvenes que puedan reforzar el colectivo en un club que ha adolecido de identidad durante las dos últimas temporadas.

En mayo de 2022, el internacional francés renovó hasta 2024, aunque posó, junto a Al Khelaïfi, con una camiseta que lo anunciaba hasta 2025. Fueron dos años de contrato los que firmó Mbappé con opción a otro suplementario que únicamente podría ejecutar el jugador unilateralmente. Para que esto se produzca, el mercado de fichajes será capital, pues el crack de Bondy quiere garantías deportivas y un proyecto que aspire realmente a ganar la Champions League.

Al Khelaïfi, que no cumplió sus promesas el año pasado, se ha involucrado completamente esta semana para intentar, de una vez por todas, forjar un equipo competitivo y sin distracciones externas que perturben el rendimiento deportivo. El presidente fue el que abogó por sancionar a Messi, hace un año declaró el fin de los lujos en París y escuchará ofertas por Neymar, siendo Mbappé el único del trío ofensivo que tiene, salvo una hecatombe mayúscula, garantizada su continuidad a partir de junio.

El PSG necesita asegurar el decimoprimer título de la Ligue 1, una cifra jamás alcanzada en la historia del fútbol francés. Para ello, Kylian Mbappé, que ya es el jugador más importante de la plantilla, deberá dar un paso adelante para que las ausencias de Messi y Neymar no se noten. Después llegará el mercado de fichajes, un período que se anticipa decisivo, pues será el último cartucho de Luis Campos y Al Khelaïfi para acercar al delantero a la renovación. De lo contrario, el escenario será muy pesimista en 2024.