Más ilusión, menos expectación
El mejor momento del equipo con Ramírez, metido por primera vez en zona de playoff, coincide con un descenso de espectadores en El Molinón.
Miguel Ángel Ramírez tiene motivos para estar feliz y transmitir ilusión en el nuevo proyecto. El triunfo sobre el Tenerife ha colocado al Sporting en la sexta posición de la tabla, en zona de playoff de ascenso, circunstancia que no se producía desde hace casi un año.
Este Sporting se está mostrando altamente competitivo en El Molinón donde ha hecho pleno hasta ahora. Tres partidos, tres victorias, las dos últimas conseguidas con goles en el tiempo añadido lo que habla de la exigencia que se impone el equipo hasta el último segundo de cada partido delante de su público. La asignatura pendiente está en las salidas; el empate en Oviedo necesita continuidad.
Dos puntos más, un gol a favor menos y dos goles en contra más que hace un año en esta jornada. Ésa es la comparativa entre el inicio del Sporting la pasada temporada, con Abelardo en el banquillo, y la actual con Ramírez, que tras la última victoria recordaba también que hacía dos años que el equipo no conseguía tres triunfos consecutivos en casa.
Eso sucedió, en efecto, con David Gallego como entrenador, también en las primeras jornadas. Aquel Sporting del curso 2021-22 se colocó incluso líder y logró una más, un cuarto triunfo seguido en El Molinón. Con el técnico catalán, aquel inicio desató la ilusión de todo el sportinguismo porque sumaba tres puntos más en la sexta jornada e incluso se mantuvo en ascenso directo hasta el décimo partido.
El Sporting de Ramírez mantiene, por tanto, el mismo patrón que en los inicios de campeonato de las dos temporadas anteriores. Ahora necesita confirmar este buen inicio y sobre todo darle continuidad, porque todos recuerdan cómo acabaron esas dos campañas, con idéntico resultado final, en el puesto 17 de la clasificación.
El aumento de la ilusión que genera el momento del equipo choca con un descenso en el número de espectadores que acuden a El Molinón, cada vez menor en cada uno de los tres partidos disputados hasta el momento actual. La expectación que genera el equipo ha bajado y eso que ya ha quedado atrás el verano, que podía ser un motivo para una menor afluencia de público.
Las cifras oficiales de asistencia en los tres partidos han sido las siguientes: 18.394 (Mirandés), 16.890 (Burgos) y 15.792 (Tenerife). Ello hace una media de 16.717 espectadores en cada encuentro, muy lejos de los 19.738 de hace un año, es decir, 3.000 aficionados menos acuden a El Molinón cada jornada. Cabe recordar en este sentido que el Sporting cuenta con 18.600 abonados, según datos del club, casi 1.500 menos que los que acabaron la pasada campaña.