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FRANCIA

Los ‘indeseables’ siguen apartados del PSG

Este miércoles, los parisinos volvieron a entrenar en Camp des Loges tras su gira por Japón y hubo cinco jugadores que no entrenaron con el resto del grupo.

Ander Herrera en una sesión del PSG.
PSG

El PSG volvió este miércoles a los entrenamientos en París tras una larga gira por Japón. Entre medias, el conjunto parisino disputó tres amistosos, ingresó una gran cantidad de dinero (en torno a 15 millones de euros) y asentó las bases del sistema que desarrollará Galtier a lo largo de la temporada. En su vuelta a Camp des Loges, los ‘indeseables’, término referido a los jugadores con los que no cuenta el club, tampoco entrenaron con el resto de sus compañeros.

Los descartes, que son Ander Herrera, Kurzawa, Wijnaldum, Rafinha y Draxler y que no viajaron a Japón por imperativo de Luis Campos, no formaron parte de la sesión que dirigió Galtier y en la que sí estuvieron las dos nuevas incorporaciones, Hugo Ekitike y Mukiele, anunciado hace dos días como fichajes del PSG. Luis Campos y Galtier tomaron la decisión conjuntamente de aislar a aquellos jugadores con los que no quiere contar el vigente campeón de la Ligue 1 y así se lo han hecho saber para que se busquen una salida cuanto antes.

El que más papeletas tiene de dejar el PSG en las próximas horas es Wijnaldum. El neerlandés, que aterrizó hace justo un año en París como agente libre, no se ha asentado jamás en el equipo y ya les ha comunicado a los dirigentes su deseo de salir cuanto antes. Las negociaciones con la Roma avanzan considerablemente y el jugador, que se entrena en solitario junto a los otros descartes del PSG, podría fichar por el actual campeón de la Conference League este fin de semana.

Respecto a Kurzawa, Rafinha, Draxler o Ander Herrera, la situación es mucho más compleja. Los cuatros se sienten cómodos en París y, aunque no van a entrenar en todo el año con el resto de sus compañeros, no ven, de momento, el motivo para dejar el PSG. El club trabaja para encontrarles una salida cuanto antes para intentar cerrar una plantilla de máximo 25 jugadores al finalizar el mercado.