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COPA DEL REY | ATHLETIC-OSASUNA

¿De dónde viene la rivalidad entre Athletic y Osasuna y cuál es el balance de resultados hasta la fecha?

Los continuos fichajes de las ‘joyas’ de la cantera de Tajonar hacen que en Pamplona se vea como un expolio sistemático

¿De dónde viene la rivalidad entre Athletic y Osasuna y cuál es el balance de resultados hasta la fecha?
M. DonatoFC Bayern via Getty Images

En términos futbolísticos, hay pocas cosas en Euskadi comparables al derbi entre Athletic y Real Sociedad. Pero el pulso entre los bilbaínos y Osasuna también levanta mucha polvareda. Y todo por la reciente costumbre enraizada en Lezama de captar grandes valores de Tajonar. La primera gran polémica estalló en 2005. El presidente Patxi Izco anunció la “ruptura de relaciones” con el Athletic después de que éste hubiera fichado a Isma López y Javi Eraso, dos jugadores cadetes del club rojillo, lo que el mandatario navarro calificó entonces de “actitud prepotente y de desprecio hacia Osasuna”.

Izco se había mostrado siempre muy beligerante con la política de fichajes del club vizcaíno en Navarra. La situación se reprodujo hace seis años, con la contratación del lateral derecho Jesús Areso. En este caso, fue Luis Sabalza quien rompió los puentes de conexión con Bilbao. Lo curioso es que el chaval veía en el filial que no tenía opciones de dar el salto al primer equipo y no quiso renovar como rojiblanco, de tal forma que le castigaron con un año en la grada. Y, para rizar el rizo, se decantó por fichar por Osasuna cuando acabó su aventura en Lezama, en 2021. Así que le tocó desandar el camino. Estos tres casos forman parte de una larga serie de promesas que se fueron de El Sadar. Javi Martínez, Muniain, Iñaki y Nico Williams, Sancet... sólo se pagó por el primero, seis millones, y se sacaron en Bilbao 40, abonados por el Bayern de Múnich. Se puso el ojo en otros, como Mikel Merino y Oroz, pero no se consumaron los traspasos. Casi 50 operaciones de este tipo se han dado en la era reciente.

Todo ese proceso hizo que dos aficiones que se llevaban bien fueran adquiriendo ciertas rencillas. Osasuna colocó una cláusula anti-Athletic cuando traspasó a Berenguer al Torino en 2017. Ricardo Barkala, uno de los candidatos a la presidencia rojiblanca en junio del año pasado, lanzó como reclamo para sumar votos un acuerdo con Moncayola abonando la cláusula de 22 millones de euros. También se estudió pagar los 20M€ del blindaje de David García si se marchaba Iñigo Martínez al Barcelona. Con el aterrizaje de Jon Uriarte en el sillón de Ibaigane se rompió el acuerdo con ‘Monca’ y se han reestablecido algo las relaciones fluidas.

El pasado no fue tan espinoso. El Athletic tuvo el honor de participar activamente en 2020 en el Centenario del Club Atlético Osasuna, una entidad con la que hay registrados nada menos que de 125 partidos, entre amistosos y oficiales. Todo empezó un 4 de noviembre de 1923, cuando Osasuna, disputó un amistoso contra el Athletic en San Mamés. Los leones ganaron 5-3. Comparecían los rojillos como campeones de la Serie B de la Federación Guipuzcoana, a la que estaban inscritos, ante un equipo rojiblanco reforzado con varios jugadores de otros equipos vizcaínos. Entre los futbolistas de aquel Osasuna había uno, que por entonces actuaba como delantero centro, que acabaría haciendo historia en el Athletic: el ondarrutarra Juanito Urkizu, que había destacado en el Deusto. Acabaría haciendo una brillante carrera como defensa rojiblanco a las órdenes de Mr Pentland y no digamos de entrenador, con una Liga y tres Copas y nada menos que 241 encuentros de los de entonces, que después batirían Javier Clemente y más adelante Ernesto Valverde. Nadie ha sumado más títulos en el club entre sus dos facetas.

A esa cita le sucedieron décadas sin enemistades. También se vivieron años de concordia en la era moderna. En los años 90, Osasuna tenía una historia contrastada en la categoría y en uno de sus malos momentos unió el descenso a un grave agujero económico. El Athletic planteó entonces un acuerdo de futuro: ofrecía 50 millones de pesetas por temporada como ayuda y al término de cada campaña tenía un derecho preferencial sobre jugadores del club navarro. Por esa vía llegaron Orbaiz y Tiko. Antes, todavía sin tener un acuerdo tácito entre entidades, habían firmado Lacruz y Nagore. Por todos pagó el Athletic.

El pacto se rompió sin cumplirse la mitad del tiempo estipulado porque los socios de Osasuna obligaron a Javier Miranda, entonces presidente, a desvincularse del mismo. Había muchos que acusaban al Athletic de expoliar la cantera navarra. Se juntaba que fichaba jugadores para el primer equipo y también tenía convenios de colaboración con otros clubes de la comunidad. Hubo enorme desagrado por parte de la gente por el traspaso de David López, fue otra de las supuestas gotas que colmaban el vaso de la paciencia. Frente a la indignación por su marcha a Bilbao, todos vieron con buenos ojos la salida de Monreal al Málaga años más tarde. Se fue casi como héroe. Es lo que tiene esta rivalidad de nuevo cuño.