La Real vuelve dolida y agotada de Barcelona

La Real Sociedad ya está de vuelta en San Sebastián, después de su eliminación copera en el Camp Nou contra el Barcelona. El equipo txuri-urdin regresó muy dolido a San Sebastián por la oportunidad que se le escapó de volver a ganar en el campo del Barça 32 años después, por cuarta vez en su historia; porque aunque todo se le puso en su contra, hizo méritos más que suficientes como para haber forzado la prórroga y llevar la eliminatoria hasta sus últimas consecuencias. Los jugadores estaban tristes en su vuelta a Zubieta, y se notaba en sus caras, porque entienden que completaron un partido muy serio y que no fueron inferiores a un Barcelona que pasó muchos apuros para pasar a semifinales, aún jugando con un jugador más toda la segunda parte. La Real hizo un gran trabajo, pleno de dignidad y orgullo, jugando con diez jugadores durante 56 minutos, una dificultad añadida a la que se unen las ocho bajas con las que afrontaba el choque, alguna muy relevantes como las de David Silva y Mikel Merino.

El más afectado de la expedición txuri-urdin era Brais Méndez, consciente de que se había equivocado en la acción que provocó su expulsión en el Camp Nou, dejando a su equipo en inferioridad desde el minuto 39 del partido. El gallego no gestionó bien emocionalmente un momento en el que tenía que haber tenido la cabeza más fría, porque Levandowski llevaba durante varios minutos intentando sacarle de quicio, algo que consiguió, a juicio de los acontecimientos. El gallego se arrepintió al instante de la acción en la que entra con una dureza excesiva sobre Busquets, y en el vestuario pasó un mal rato, pidiendo disculpas a sus compañeros en el viaje de vuelta. Aunque en el equipo donostiarra siguen pensando que tenía que haber prevalecido la opinión de Gil Manzano, que en primera instancia sólo le sacó tarjeta amarilla, hasta que le avisaron del VAR para que revisara la jugada. “Si veo la jugará en el VAR también le expulso; pero seguro que Xavi piensa como yo, es una jugada de fútbol, una entrada a destiempo, que no es agresiva, de las que se dan en todos los partidos, y en el campo le hubiera dejado con la amarilla”, señaló tras el partido Imanol Alguacil, el técnico realista. Aunque lo que molesta realmente es la diferencia de criterio, que no entienden en la Real; porque precisamente Dembelé hizo una acción similar a la de Brais en el partido de liga contra el Getafe y se quedó con la amarilla, la sanción inicial que tuvo el jugador gallego de la Real.

Plantilla muy fatigada

Aunque lo que más preocupa en el cuerpo técnico de la Real Sociedad es lo fatigado que acabó el equipo el partido del Camp Nou. Al lógico cansancio por el tremendo esfuerzo de aguantar con un futbolista menos algo más de la segunda parte, se une que físicamente muchos jugadores acabaron tocados, y regresaron muy justos a San Sebastián. Es verdad que entienden que hasta el domingo entienden que hay tiempo más que suficiente como para recuperarse y estar en condiciones para visitar el Santiago Bernabéu este domingo, para hacer un último esfuerzo antes de encarar por fin una semana limpia que le va a venir muy bien al equipo txuri-urdin.

Este jueves se ha hecho trabajo de recuperación en Zubieta, y después tienen dos sesiones por delante para preparar a conciencia el partido contra el Real Madrid, en el que se ganarlo puede permitirse el lujo de verse inmerso en la pelea por La Liga, porque empataría a puntos con el equipo de Ancelotti, por mucho que sea casi una quimera pensar en que se puede pelear por ese objetivo hasta el final de temporada. Para ello, Imanol está muy pendiente de ver cómo recuperan los jugadores que acabaron con molestias físicas el choque de Copa. Cualquier baja sería un contratiempo importante, porque se uniría a los ocho jugadores que ya están en la enfermería. Parece que no se va a recuperar a ninguno para la visita al Bernabéu, con Cho y Silva quizá con alguna opción, pero no se les va a forzar, porque se corre el riesgo de empeorar sus dolencia físicos.

De Barcelona, Diego Rico regresó con una brecha importante en la zona de la tibia por la que tuvo que ser sustituido al descanso en el Camp Nou. Además, Pablo Marin acabo el partido acalambrado y con una pequeña sobrecarga muscular. Sorloth también aguantó sobre el césped más de lo que aconsejan sus molestias en la rodilla y terminó también tocado, aunque no debería tener problemas para jugar en Madrid. Además, con Take Kubo y Mikel Oyarzabal tuvieron que gestionar la carga de minutos que jugaron en Barcelona para evitar sobrecargas que les provocaran pequeñas roturas de fibras. También estarán entre algodones las próximas horas, aunque deben estar listos para viajar el fin de semana con el resto de convocados. También Barrenetxea hizo un esfuerzo importante en la segunda parte y acabó cargado muscularmente, hasta el punto de que tuvieron que ayudarle a levantarse del césped al final del partido para ir al vestuario.