La Real planteó a la UEFA no vender entradas a los equipos rivales

La Real Sociedad solicitó de urgencia una reunión con la UEFA tras los graves incidentes protagonizados por los radicales del Anderlecht en el Reale Arena en la primera parte del segundo partido de la Europa League de esta temporada. El encuentro ya se ha celebrado y se ha tratado de una primera toma de contacto “positiva”, como señalan desde el club donostiarra. Aunque fue insuficiente, porque harán falta más reuniones para poder tomar decisiones drásticas que permiten empezar a poner freno al problema grave que tiene el fútbol europeo con los aficionados radicales y que ya sufrió San Sebastián y la afición de la Real este pasado jueves. El club donostiarra fue con todo a la reunión y planteó a la UEFA de manera muy seria la posibilidad de negarse a enviar entradas a los clubes rivales si estos no se comprometen a asegurar que van a acabar en manos de seguidores ultras o directamente si tienen sectores tan radicales y con tantos antecedentes como los del club belga.

El club donostiarra quiere garantizar, por encima de todo, la seguridad de sus aficionados y que no vuelvan a ocurrir los graves sucesos del jueves con los radicales del Anderlecht. Se pidieron explicaciones a la UEFA por su inacción y pasividad ante lo que estaba ocurriendo en la grada visitante, y no hacer nada para parar el partido a tiempo, o incluso llegar a suspenderlo, por la gravedad de los hechos que estaban ocurriendo. Desde los miembros de seguridad del máximo organismo del fútbol europeo asumieron su responsabilidad y pidieron disculpas por no haber detenido el juego en el Reale Arena a tiempo.

A partir de ahí, desde la UEFA se ha comprometido a poner en marcha un plan para tratar de poner coto al fenómeno ultra en el fútbol europeo con acciones más contundentes y sanciones más duras. También se compromete a tener más reuniones próximamente para seguir trabajando en este asunto que se le puede ir de las manos. Desde la Real tienen claro que los protocolos de seguridad con los radicales deben mejorarse y cambiarse, prohibiendo en muchos casos viajar a los ultras de los clubes. No puede ser tampoco que por culpa de un partido se condicione la vida de una ciudad como ha sucedido esta semana con los ultras del Anderlecht, a los que juntó en el centro de San Sebastián.

La Real Sociedad avisó a la UEFA de su decisión de no vender entradas a clubes europeos con sectores radicales entre su afición, arriesgándose a recibir sanciones económicas, porque por contrato está obligado a ceder el 5% del aforo para la afición rival. La UEFA entendió su postura, pero considera que no es la solución. El club donostiarra, por si acaso, estudia también otras ubicaciones para la afición rival en su estadio. No obstante, de cara a la siguiente visita europea, la del Ajax de Amsterdam, con radicales considerados más peligrosos que los del Anderlech, desde la Real se plantean no vender entradas para la afición visitante fuera de las taquillas de Anoeta, salvo que el club de Países Bajos le asegure que no van a acabar en manos de los ultras y que no van a viajar a San Sebastián. Esa decisión ya la tomó hace tiempo la Real Sociedad en la liga española con el Atlético de Madrid, al que no le manda entradas para sus partidos en Anoeta porque no le asegura que no vayan a ser vendidas a ultras del Frente Atlético. La afición rojiblanca sí puede comprar entradas en taquilla de manera individual, pero bajo el control de la Real Sociedad. Algo así se plantea hacer en Europa el club donostiarra.

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.