La Real estudia reforzar las medidas de seguridad para la afición visitante en Europa
El club donostiarra está haciendo una reflexión porque con lo que hace en competición europea no es suficiente para controlar situaciones como las vividas con los ultras del Benfica.
La Real Sociedad estudia reforzar las medidas de seguridad que tiene en la actualidad para la afición visitante, especialmente en los partidos de competición europea. Después de los graves incidentes ocurrido durante el partido de Champions League contra el Benfica, con el lanzamiento de bengalas por parte de ultras del club lisboeta a aficionados donostiarras que estaban en las localidades más bajas del estadio poniendo en serio riesgo su integridad, los responsables del club txuri-urdin están haciendo una profunda reflexión, porque con el protocolo que se establece en los partidos europeos no es suficiente para controlar situaciones de tanto peligro.
En la Real aplican un protocolo muy estricto con la afición visitante y trabaja siempre con mucha responsabilidad para intentar evitar problemas tanto dentro del estadio como fuera del estadio. Porque aunque sólo sea responsable de lo que pasa en el campo de fútbol, también se implica en conocer dónde y cómo llega la afición del equipo de fuera al estadio, especialmente los más radicales. También realizan una revisión exhaustiva de los seguidores visitantes al entrar en el campo, hasta el punto de que se les pide que se descalcen. Pero en ese estricto protocolo algo falló en el partido contra el Benfica. Porque hubo un grupo pequeño de radicales del Benfica que se escapó de la escolta que llevaba a la afición lisboeta hasta el Reale Arena, provocando los altercados en la Plaza Armerías, que es donde suele juntarse la Bultzada Txuri-urdin antes de los partidos de la Real Sociedad. Y porque a pesar de los cacheos de la entrada y del mucho material incautado, hubo radicales del Benfica que metieron bengalas y otro tipo de material peligroso al estadio. Así que algo falló y eso es su responsabilidad, por lo que lo normal es que la UEFA le ponga una multa económica.
Además, el club donostiarra colocó en la zona más alta del estadio a los seguidores más radicales del Benfica, y al resto con la protección de una cristalera de seis metros de alto. Pero aún así no se pudo evitar los incidentes graves. El club, preocupado por lo que ocurrió, estudia ya qué medidas implementar para mejorar la seguridad en esa zona visitante y que no se repitan esos graves incidentes, sin descartar bajar a la afición visitante al anillo inferior, como hacen algunos clubes en Inglaterra. Porque esta vez se tiraron bengalas, con el evidente riesgo de que pasara algo muy grave; pero en otras ocasiones ya se han quejado socios de esa zona del lanzamiento desde la zona visitante de otro tipo de objetos y hasta escupitajos. La reflexión está encima de la mesa, con el servicio de seguridad a la cabeza que lleva tiempo trabajando para mejorar el protocolo. A ver si este susto importante sirve para tomar más medidas con la afición visitante, porque evidente que en Europa con lo que tienen preparado no sirva, es insuficiente. Dentro del club hacen esa reflexión, y desde la preocupación están decididos a fortalecer la seguridad con más medidas en esa zona.
Rápida identificación de los “delincuentes”
Llamó la atención la celeridad con la que la seguridad de la Real Sociedad, en colaboración con la Ertzaintza, identificó a los autores de los lanzamientos de bengalas. En el club donostiarra, cabreados por lo sucedido y por cómo se les había colado ese material en el cacheo de la entrada porque era su responsabilidad, se puso manos a la obra y con la mayor diligencia posible a identificar a los “delincuentes”, como los llamó el presidente, Jokin Aperribay. Pusieron todo el material de las cámaras de seguridad del campo al servicio de la Ertzaintza y retuvieron en el campo a los radicales del Benfica para reconocerles uno a uno, con el fin de identificar a los autores materiales de los graves incidentes. Se identificó con ese trabajo a 10 ultras. La identificación terminó a las 23.20 horas, que fue cuando abandonaron el estadio los últimos que estuvieron retenidos. De esos, se imputó a dos personas y hubo tres levantamientos de acta, es decir tres aficionados que recibirán una denuncia por la ley del deporte.
Las investigaciones no han terminado y continúan abiertas para intentar determinar la identidad de los autores de los lanzamientos de las bengalas. Desde la Real Sociedad han puesto el asunto en manos de sus abogados para ver cómo se les puede denunciar penalmente por la justicia ordinaria. De todas formas, los cuatro arrestados en los altercados previos al partido ya están puestos en libertad, después de que se les tomara declaración.
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