La explosión de Iñaki Williams
El internacional ghanés está ante la mejor temporada de su carrera. Tres partidos seguidos marcando. El gol ante el Getafe, deslumbrante.
Iñaki Williams acaparó ayer un protagonismo indeseado al final del encuentro ante el Getafe. Cuando Carmona hacía ver que estaba lesionado y entró en el campo como pudo para tumbarse y ser atendido, algo que provocó una nueva interrupción del juego, el ‘9′ se encendió como pocas veces se ha visto. Se fue a por Bordalás y le reprochó lo que él entendía una nueva maniobra para perder tiempo. El preparador alicantino salió de su área técnica y le mandó callar, así que el colegiado Díaz de Mera le expulsó. Hizo constar en el acta tal circunstancia y le pueden caer dos partidos de sanción. Uno de sus ayudantes, Juan José Jiménez, siguió el mismo camino.
“Es una vergüenza que se pierda tiempo así. Esto no forma parte del fútbol. Con la adrenalina a tope, he ido a recriminárselo. No me siento orgulloso de ello, pero la impotencia de que se pare el juego de esta manera no me gusta nada. Sé que es cosa de él (de Bordalás). En Primera todos le tenemos calado. Sabemos a lo que juega su equipo, es lícito, pero a muchos no nos gusta”, esgrimió Iñaki, quien, eso sí, en compañía de Herrera pidió a la grada que cesara con los gritos de “a Segunda” dedicados al cuadro azulón. La impotencia ante Bordalás se demuestra en cifras tercas: el Athletic sólo ha ganado uno de los 13 partidos oficiales disputados frente al alicantino, y ha empatado nueve, el porcentaje más alto de la historia rojiblanca frente a cualquier entrenador con un mínimo de 10 partidos jugados.
No es amigo de meterse en follones Iñaki. Escapa de ellos, aunque a veces le salpican, como con los gritos racistas en Cornellà años atrás. Y ese bochornoso final de ayer no empaña un partido descomunal del hermano de Nico. No podía ni con las medias al final después de decenas de carreras. El 2-1 fue una verdadera obra de arte. De Marcos se vio sin auxilio en tres cuartos de campo tras un pase desde la defensa. Inició la enésima carrera Iñaki para dar un apoyo al lateral. Este le cedió y en el área se inventó un regate con el tacón ante un blandito Angileri y se sacó un zurriagazo con la zurda que batió a Soria.
Iñaki Williams ha marcado en las tres últimas jornadas: ante Cádiz, Alavés y Getafe. Es la primera vez que lo consigue en estas diez temporadas y 315 partidos de Liga como león, aunque contando todas las competiciones, sí lo logró en un par de ocasiones. Lleva cuatro dianas en 7 compromisos y de seguir en esa progresión, alcanzaría las 21. En 2015 en seis partidos firmó cuatro, pero estuvo ausente varias jornadas y corría la undécima cuando llegó a esa cifra. Su techo realizador hasta ahora son los 15 goles (13 en Liga y 2 en Copa) de la campaña 2018-19. Ha llovido desde entonces. En categorías inferiores se destapó con 30 en 31 partidos ligueros, más 4 en Copa en el División de Honor Juvenil en la 2012-13. En su último año en el filial hizo 13 tantos, en la 2014-15. El año pasado llegó a los 10 en Liga y uno en Copa. Por todo ello se puede concluir que Iñaki está ante la mejor campaña en Primera. Valverde ha entendido al fin que su sitio es la banda derecha, en el otro costado distinto al de su hermano Nico, y se siente menos presionado que como referencia, cuando se bloquea al tener que encarar al meta rival en el ‘uno contra uno’. Para ese papel ya está Guruzeta.
El canterano ha entrado de lleno en la pelea por el Pichichi. Tanto él como Abdón Prats (Mallorca) se unieron en la pasada jornada al grupo de perseguidores del trío de líderes de la clasificación de artilleros de LaLiga EA Sports, formado por Bellingham (Real Madrid), Lewandowski (Barcelona) y Morata (Atlético de Madrid), que han logrado cinco. No obstante, Morata aún tiene que jugar hoy el encuentro de la séptima jornada en El Sadar ante Osasuna. Lewandowski salió desde el banquillo en el campo del Mallorca y no marcó y Bellingham no jugó ante Las Palmas. Prats e Iñaki Williams se unen a Arribas (Almería), Kubo (Real Sociedad) y Sorloth (Villarreal).
El internacional ghanés protagonizó un récord que será difícil de batir en el futuro. Fijó en 251 partidos consecutivos el tope de participación seguida de un jugador en la historia de LaLiga. El delantero rojiblanco no se perdió nada desde el 20 de abril de 2016, cuando se enfrentó al Atlético de Madrid en San Mamés, hasta el 29 de enero de 2023, en una visita a Balaídos. Le frenó una sobrecarga muscular en los isquiotibiales de su pierna derecha. Superó por 49 los compromisos consecutivos del realista Larrañaga, segundo en este ranking, al que dejó atrás el 1 de octubre de 2021 ante el Alavés en La Catedral. Antes, el 1 de diciembre de 2019 también en San Mamés, había pulverizado el récord del Athletic que ostentaba hasta entonces el guardameta Carmelo Cedrún con 132 choques. Las malas noticias para Valverde son que en enero su mejor jugador actual se va a la Copa de África.